La frase de Otegi “Presos por presupuestos” lleva buen camino

Aparte de la inmediata aplicación de la reforma de Ley que acorta las condenas de los etarras en España, al computarse el tiempo que pasaron en prisiones francesas; la progresión de terceros grados que vienen concediendo los sucesivos gobiernos vascos y otras medidas favorables, como considerarlos presos comunes como cualquier ratero, sigue su curso el objetivo que Otegi y su partido, consocio de Sánchez en el “Gobierno de mayoría social de progreso” de conseguir la liberación total de los etarras que siguen en las prisiones del País Vasco. Además, en la presente etapa, Bildu se ha marcado el objetivo de que sea reformado el Código Penal en cuanto para que reduzca el tope máximo de 40 años para el cumplimiento de condena por los crímenes terroristas. El objetivo es que, de inicio, todos los etarras vayan saliendo en libertad.

Tras obtener de Pedro Sánchez, a cambio de su apoyo, entre otras cosas, la cesión de las prisiones y su régimen ordinario, el PNV (ya saben, los de “de rodillas antes Dios”, como juran sus lendakaris), el partido de Sabino Arana incluyó los cursos de jardinería en sus programas de inserción de los pistoleros de ETA. Es una medida audaz enseñar a cambiar las pistolas, la bomba y el tiro en la nuca por el rastrillo y el cultivo de amapolas. Cierra el ciclo con doble sentido, ya que esas flores pueden ser ofrecidas a los familiares de los asesinados para decorar sus tumbas, como se ha comentado con cierto humor negro. En unos cursos que organizaba la Facultad de Derecho de la Universidad de Vigo y el Consejo General del Poder Judicial, en las que coincidí como ponente con el entonces juez Marlaska éste me contó su experiencia en la persecución judicial de ETA, revelándome que todos los etarras se han negado a colaborado para aclarar los más de 300 de sus crímenes que quedaron impunes, entre ellos el secuestro, tortura y desaparición de tres jóvenes gallegos, confundidos con guardias civiles cuando fueron al cine en Francia, y de los que nunca más se supo.

La consejera de Justicia del Gobierno vasco y Derechos Humanos, María Jesús San José acaba de revelar que desde julio de este año se han concedido 168 terceros grados, siete de ellos a presos de ETA y dice que el modelo penitenciario vasco tiende a la concesión del tercer grado "porque está demostrado con estudios estadísticos que acceder a la libertad total desde una situación de semilibertad evita la reincidencia y beneficia a toda la sociedad". En su conjunto, desde que Sánchez cedió al Gobierno del PNV (21 de junio de 2021) las competencias en prisiones se han otorgado terceros grados a 68 terroristas de ETA, algunos de ellos con graves delitos de sangre. Conforme las exigencias de la organización de apoyo a los etarras que dirige un ex consejero de Interior, Azkárraga, bajo la palabra “resocialización”, que en modo alguno exige arrepentimiento ni colaborar para por lo menos aclarar los crímenes impunes, por otro lado, ya prescrito, quiere ver a todos los terroristas en la calle.

Vista la progresión de las cesiones de Sánchez a sus socios para adquirir su apoyo para seguir en la Moncloa (indultos, reforma del Código Penal, Amnistía, apoyo a la reforma de las previsiones sobre tiempo de condenas cumplidas en el extranjero) ¿puede alguien asegurar que el asunto no seguirá su curso? Por lo visto, no cabe recordar los más de 800 muertos, extorsiones, secuestros y años de sufrimiento es usar la memoria de ETA como si se añorara, de lo que se acusa a otros partidos, mientras se extrema el recurso de los hechos incluidos dentro de las memorias democrática e histórica. ETA no existe. Pero no sus secuelas y sus portavoces como Otegi y sus condiciones para seguir apoyando al doctor Sánchez. Pero éste aseguró hace tres años, que jamás cedería en este sentido a las pretensiones de sus socios. En un acto con militantes en Eibar y tras leer la declaración de la izquierda abertzale en las que lamentaba el dolor de las víctimas del terrorismo, Otegi dijo que "si para que salgan los 200 presos (de ETA) hay que votar los presupuestos, los votaremos". Y lo ha repetido. Existen controversias sobre el número exacto que, finalmente se beneficiarán de la reforma legal que permitirá convalidar a los presos de ETA las penas que cumplieron en otros países “Sare”, plataforma de apoyo a los etarras, cuenta 52 y apunta otros siete que, según sus cuentas, deberían ser excarcelados antes de que concluya el año. Ahora mismo son 145 los presos de ETA.