Cuidados

Ni gran relevo, ni la amenaza de los inmigrantes que quitan el trabajo a los nacionales, ni futbolín en las salas comunes, ni futa a la entrada. Las grandes y medianas empresas, de las pequeñas ni hablamos no porque los problemas no sean los mismos sino porque normalmente carecen de infraestructura para afrontar los nuevos retos, comienzan a diagnosticar los motivos por los que el absentismo crece de manera importante, porqué les cuesta cada vez más retener el talento y porqué sus trabajadores se encuentran descontentos con su carrera laboral. Reconocida la enfermedad ahora es preciso que se apresten al tratamiento, que no es otro que cuidar a los trabajadores y que lleven a la práctica eso que tantas veces dicen de que el mayor activo de su empresa son sus empleados. Y aquí la cuestión no es que adopten medidas estándar de motivación y cosa semejantes, sino preguntar directamente al trabajador que es lo que necesita para sentirse a gusto en la empresa. Así seguro que aumentan sus beneficios.