Selectividad sin mascarilla en Vigo

Alumnos vigueses, muy concentrados durante uno de los exámenes en el primer día de pruebas en la Facultad de Filología.

Unos 2.700 estudiantes se enfrentan desde ayer en Vigo a las pruebas de acceso a la Universidad, la temida Abau, en la que este año se inscribieron 12.845 candidatos en Galicia y en la que por primera vez era posible presentarse con una materia suspensa. Son tres días de exámenes en los que todavía quedan reminiscencias de la pandemia porque la mascarilla es “opcional”, aunque muy pocos la llevaban, y hay una separación de un asiento entre los alumnos (en pandemia eran tres). También se mantienen algunos cambios que se habían impuesto con el covid, como la ventilación de las aulas, el acceso ordenado y la salida al exterior al terminar para evitar ruidos y aglomeraciones en pasillos, o incluso el modelo de examen, que desde la pandemia no tiene opción A y B, sino que se puede elegir entre más posibilidades (por ejemplo en el examen de Lengua había que responder a 5 preguntas de un total de 8).

Lo que no cambia son los nervios de la primera hora, que se repiten año tras año, y que se desvanecieron en cuanto acabó el primer examen, Historia de España. “El nerviosismo cambia del primer examen al segundo, parecen personas diferentes, se tranquilizan y van más rodados, y al segundo día ya son expertos, parece que este es su centro, se adaptan muy rápido”. Esto decía ayer Pilar Piñeiro, presidenta de una comisión delegada del campus y profesora de Organización Empresarial. Se mantienen también las normas para evitar que copien, con la prohibición de llevar relojes inteligentes, los pabellones auditivos despejados y el móvil apagado y en la mochila, algo que “se debe hacer por honestidad profesional”. Aún así todos los años cazan a alguien copiando y el castigo puede ir desde el cero técnico en un examen al suspenso en la Selectividad.

El papel del ferrocarril, la crisis de la Restauración o la Transición fueron las propuestas en el examen de Historia de España, el primero de la Selectividad. Le siguió el de Lingua Castelá e Literatura II con un texto de Imma Monsó en La Vanguardia que establecía un paralelismo entre la cirugía estética y los filtros de realidad virtual de Instragram, y se podía elegir entre García Márquez, García Lorca, Muñoz Molina o Buero Vallejo. Por la tarde hubo troncales de modalidad y optativas, con lo que había menos alumnos. La jornada de hoy comienza con Lingua Galega.

El 40% de los alumnos se examinan en los tres campus de la UVigo y en A Rúa. Son 5.154, de los que 2.712 se presentan en Vigo, 1.228 en Pontevedra y 1.110 en Ourense. En el resto de Galicia, 3.930 alumnos se examinan en centros de la USC y 3.761 en la de A Coruña.