Teresa Portela, a la final de K4 500: siete Juegos, siete finales
Juegos Olímpicos | Piragüismo
Teri Portela agigantó todavía más su figura al meterse en la final del K4, barco en el que accedió a semifinales Rodrigo Germade, que también cumplió a la primera en el K2
No son siete novias para siete hermanos. Son siete finales para siete Juegos Olímpicos. Es vivir instalada en la excelencia durante todo el siglo XXI. Es María Teresa Portela Rivas. La palista de Aldán y sus compañeras Sara Ouzande, la pontevedresa Carolina García y Estefanía Fernández cumplieron su primer objetivo en París y accedieron directamente a la final con un tiempo de 1:32.92, justo por detrás del bote neozelandés, gran favorito al oro (1:32.40).
Una vez puesto el ‘check’ a la primera tarea y sin necesidad de repesca, queda rematar la faena mañana. La final que el K4 500 disputará a las 13:40 es la séptima de la palista de Aldán en otras tantas apariciones olímpicas. Solo faltó a la lucha por las medallas en Sidney 2000. En Atenas 2004 estuvo en dos -quinta en K2 y K4-. A partir de ahí, una por cita: quinta en el K4 en Pekín 2008, cuarta en el K1 200 en Londres 2012, sexta en la misma prueba en Río 2016 y, finalmente, la ansiada medalla: plata en Tokio 2020. Ahora, de vuelta a los barcos de equipo, vuelve también a pelear con las mejores del mundo. Tiene 42 años.
También cumplió con su parte la otra mitad de la armada canguesa en la pista de Vaires-sur-Marne. Rodrigo Germade se metió en las dos semifinales que disputaba a la primera. A bordo del súper K4 que comparte con Saúl Craviotto, Marcus Cooper y Carlos Arévalo, con el que también avanzó en el K2. El morracense, en la popa igual que su paisana, inauguró el piragüismo en pista de estos Juegos con la embarcación cuádruple en la primera serie de la mañana. Fue el primer cara a cara con un bote alemán con el que apunta a disputarse el oro mañana. Segundo sin forzar (1:20.60). Más ajustada estuvo la cosa en el K2 con el betanceiro. También segundos (1:28.85), pero en la misma décima con Polonia y Canadá. El nivel en esta prueba es excelso y, de hecho, Marcus Cooper y Adrián del Río necesitaron de la repesca para avanzar a semifinales.
A nivel gallego, Antía Jácome inició la búsqueda del doble metal con una cómoda clasificación a semifinales en el C2 500 con María Corbera. La pontevedresa entra mañana en acción en el C1 200 (10:30).
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