El área sanitaria de Vigo cuenta con siete logopedas que trabajan en los hospitales Cunqueiro, Meixoeiro y Nicolás Peña, así como en el Taboada Leal. Todos ellos atendieron el año pasado a más de mil pacientes.
Su campo de acción es amplio, según explica el logopeda del Álvaro Cunqueiro, Javier Bueno. En adultos atienden sobre todo a pacientes neurológicos con daño cerebral adquirido por ictus o traumatismos, pacientes con enfermedad neurodegenerativa (ELA, Párkinson, entre otras) y a pacientes con cáncer de cabeza y cuello. Además, se ocupan de pacientes ingresados que sufren problemas respiratorios o que fueron intubados en la UCI y sufrieron un daño en las cuerdas vocales.
En la población infantil se ocupan de temas relacionados con el lenguaje pero principalmente en personas que tienen otros problemas en el desarrollo, enfermedades raras o pacientes con trastornos del espectro autista. Por otro lado, se ocupan de las dificultades para la deglución en las primeras etapas de la vida o de la rehabilitación posterior a un implante coclear.
A mayores, los logopedas participan en talleres de formación organizados para personas que cuidan a pacientes con patología neurológica. En su caso concreto les ofrecen estrategias de cuidados en el domicilio a nivel de comunicación y de alimentación cuando presentan problemas de lenguaje y deglución. Sin embargo, el enfoque de los talleres es multidisciplinar para poder ofrecer una visión global a los cuidadores, por lo que participan también neurólogos, terapeutas ocupacionales, fisioterapeutas, trabajadores sociales y otros perfiles profesionales. Hasta la fecha han formado a unas cien personas en las tres ediciones del curso. Ahora barajan la idea de grabar vídeos y elaborar contenidos para unos talleres en formato online con la idea de poder llegar a un público más amplio y ayudar a resolver el día a día.
Un proyecto piloto para centros de salud del rural
Los servicios de logopedia se centran en los hospitales, pero los profesionales aspiran a poder atender también en Primaria. No se trata de poner un logopeda en cada centro de salud, pero sí de prestar servicio en los centros de salud que están más alejados. Presentaron una propuesta al Sergas que había quedado sobre la mesa debido a las elecciones autonómicas. La idea era impulsar un proyecto piloto en uno o dos centros del rural para evitar desplazamientos a los pacientes (algunos abandonan la terapia por la falta de disponibilidad para hacer estos viajes) y también para realizar tareas de prevención. En el hospital reciben a pacientes con problemas de deglución que ya han desarrollado una neumonía o una deshidratación, algo que se podía evitar con una atención más temprana. Los problemas de deglución afectan al 20% de las personas mayores de 80 años y al 50% si viven en una residencia. Proponen logopedas en las residencias asistidas de mayores.
