La fruta, al alza, ya supera a la conserva en el Puerto de Vigo

Vigo avanza a marchas forzadas hacia su conversión en un puerto frutero, y no solo las cifras de actividad de los últimos años así lo dicen sino también las expectativas con las que trabajan tanto la Autoridad Portuaria (APV) como Termavi, la firma que gestiona la terminal de contenedores viguesa. Ambas entidades acaban de pactar una ampliación de la superficie de Guixar en unos 25.000 metros para ganar espacio a los futuros tráficos desde Sudamérica y Centroamérica que con seguridad irán llegando.

El pasado 2022, Vigo batió su propio récord al mover 183.793 toneladas de productos fruteros, básicamente importaciones (el 96 por ciento del total) y en su mayoría procedentes de Brasil, Colombia y Costa Rica. El comercio con los tres países ya es superior a todo lo que mueve al año una mercancía histórica tan ligada a Vigo como la conserva, unas 162.000 toneladas, y por supuesto que la pesca fresca. Está lejos de la primera mercancía dedicada al consumo humano, la pesca congelada, pero cada vez menos: el año pasado, facturaron 617.093 toneladas y en el ejercicio actual va en negativo con claridad por problemas en las pesquerías, en especial el caladero de Malvinas, con el cierre antes de tiempo, en agosto, de la campaña al constatarse por los científicos una caída del producto que todavía se está estudiando.

En todo caso, el auge frutero de Vigo parece consolidarse y este año también es un tráfico en positivo que podría superar las 200.000 toneladas. Hace apenas cuatro años, en 2019, Vigo tan solo movía 16.625 toneladas de verduras, hortalizas y frutas y dos años más tarde, en 2021, multiplicaba dicha cifra más que por diez gracias al acuerdo entre Termavi y la operadora de Del Monte. Como es conocido, en enero de 2020 la naviera francesa CMA-CGM inició una escala con fruta procedente de Sudamérica, que hasta entonces descargaba en el puerto de Marín a través de Hamburg Süd. Marín movía en 2019 casi 150.000 toneladas y ahora es un tráfico residual tras concentrarse en Vigo la entrada de productos fruteros en Europa. Otra línea trae naranjas desde Sudáfrica, en su mayoría para el mercado portugués.