El encuentro del alcalde y el ministro Puente dejó un nuevo cronograma de actuaciones plagado de incógnitas sobre su desarrollo, comenzando por la debilidad parlamentaria del Gobierno, incapaz de aprobar los Presupuestos del Estado 2024. En estas condiciones, todo lo que se puede avanzar es en trámites ambientales o administrativos ante la imposibilidad de que a corto o medio plazo se puedan ejecutar los proyectos. La suma de tres obras, AVE por Cerdedo, salida sur y autovía Vigo-Porriño, llega a 3.100 millones.
El más conocido es el AVE por Cerdedo, una variante planteada hace ya más de 20 años por UGT -que ahora no lo apoya- de unos 50 kilómetros entre el norte de Pontevedra y Carballiño que permitiría hacer el viaje desde Vigo a Ourense en 45 minutos, frente a una hora y cuarto por Santiago. Su coste se estima en 2.300 millones de euros. El ministro Ábalos encargó un estudio hidrogeológico que duró tres años. Ahora se hará otro hasta 2025. Así que las posibilidades reales son mínimas. En el mejor de los casos, y siempre con Presupuestos, habría que esperar hasta 2026 para realizar el estudio de impacto y el informativo del trazado, fijar calendario, aprobar un proyecto constructivo e iniciar las obras. Todo ello lleva a la década de los años treinta. Y está, por encima de todo, la inversión a realizar, que parece poco probable que un Gobierno asuma. La buena noticia es que seguirá el proyecto apareciendo en futuros Presupuestos del Estado, aunque con consignaciones mínimas.
Algo parecido ocurre con la autovía Vigo-Porriño en túnel. En el Presupuesto prorrogado solo aparecen 1,5 millones para una obra de 300 millones. El acuerdo pasa por la tramitación ambiental, que llevará dos o tres años, y a partir de ahí tendría que figurar una partida importante para su ejecución, de dos o tres anualidades. Antes de 2030 es prácticamente imposible que se pueda construir. Con respecto a la salida sur ferroviaria, avanza el estudio que estará en 2025. A partir de entonces se podría entrar en el terreno de las obras, siendo esta la que más posibilidades tiene de ponerse en marcha por el interés -hasta ahora- de Portugal y de la Xunta. La UE no ve probable dicha conexión antes de 2040. Y el Gobierno, a partir de 2030. Se irá a unos 600 millones en varias anualidades. Sí parece probable la reforma de la avenida de Madrid, de unos 10 millones, conveniada en 2016 y sin iniciar. Habrá otro acuerdo firmado con el Ministerio y a partir de entonces se podría ejecutar al fin.
