Empresas que viven pendientes del Lagares por las inundaciones
Río Lagares
Remitieron un escrito a Augas de Galicia pidiendo la limpieza del río, ante la inminente llegada de las lluvias, para evitar que sus negocios vuelvan a verse afectados
Hay empresas en Vigo que viven pendientes del río Lagares, especialmente en invierno, porque año tras año ven como sus negocios se inundan. Aseguran que el remedio está al alcance de la mano, limpiar el cauce del río para que no se desborde y hacer labores de mantenimiento para que la zona esté saneada.
Entre esas empresas está Marmolería Blanco, que tiene su sede en el Camiño do Caramuxo, y que ha pasado a la acción y ha remitido un escrito a Augas de Galicia. “Estamos llegando a la época crítica y en vista de como está el río, sin mantenimiento ninguno, volveremos a tener fuertes inundaciones”, explican desde la compañía viguesa.
Repetidas inundaciones
En el escrito remitido a Augas de Galicia, un portavoz de la empresa explica que el río Lagares, “uno de los principales recursos naturales de Vigo, en los últimos años ha mostrado un evidente deterioro debido a la falta de mantenimiento, lo que ha supuesto repetidas inundaciones en la zona industrial del Camiño do Caramuxo y más concretamente en nuestra empresa Marmolería Blanco”.
Así, adjuntan al escrito fotografías realizadas el pasado sábado 9 de noviembre. Explican que, con ellas, “queremos poner en conocimiento el estado actual del río Lagares en la zona desde el campo de futbol de Balaídos hasta el puente de Molinos, que evidencia una falta significativa de mantenimiento y cuidados adecuados”, añaden.
Limpieza y dragado
Concluyen que este descuido en la limpieza tiene “efectos directos en las inundaciones repetidas”, por lo que piden “una limpieza periódica, así como el dragado” del río Lagares “para evitar que se repitan”.
Apuntan que esta solución se ha tomado en otros ríos, como el de Sabarís, “donde se realizaron dichas obras y no ha habido más inundaciones”, añaden en el escrito.
En las fotografías que adjuntan al documento se pueden observar árboles caídos que cruzan de un lado al otro del río, vegetación que invade el cauce y obstaculiza el flujo de agua, además de acumulación de residuos.
“Todo ello reduce el ancho del cauce y aumenta el riesgo de inundaciones”, concluyen en el escrito al departamento dependiente de la Consellería de Medio Ambiente e Cambio Climático, por lo que esperan que se tomen medidas para solucionar las inundaciones y no tener que vivir siempre pendiente de las crecidas del río.
“Estamos días parados y hay plazos de entrega que perdemos”
Las empresas del Camiño do Caramuxo llevan décadas sufriendo la falta de limpieza del Lagares y las inundaciones que, invierno tras invierno, afectan a sus negocios. Hace justo un año los responsables de Marmolería Blanco sufrían una de esas inundaciones. “Hasta ahora cuando se nos ha estropeado maquinaria por el agua la ha cubierto el seguro, pero el problema es que estamos días parados y hay plazos de entrega que perdemos”, explicaba entonces Javier Blanco. “El río está lleno de árboles y maleza en el cauce y está tupido con los sedimentos que se arrastran”, añadía, “la capacidad del cauce del río está a menos del 50%, lo que provoca que cuando llueve fuerte no tenga capacidad de absorción”.
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