Sol, playa y paisajes impresionantes. Las Islas Cíes reúnen todo lo necesario para pasar un día de verano inolvidable rodeado de amigos. El archipiélago está formado por tres islas: Monteagudo al norte, Isla do Faro en el centro y San Martiño al sur. Son un entorno paradisíaco que vale la pena visitar. Aunque lo ideal es pasar allí varios días y dormir en el camping para poder disfrutarlas al máximo; las Cíes también pueden ser un destino perfecto para una expedición exprés.
¿Cómo ir hasta las Islas Cíes?
Visitar estas islas es sencillo. Es importante tener en cuenta que hay que planificar el viaje con antelación, la afluencia de visitantes es elevada y las plazas se agotan rápidamente. El primer paso para organizar una excursión a las Cíes es solicitar la autorización de desembarco. Toda la información necesaria aparece en este enlace.
Después de conseguir este permiso, es necesario comprar un billete de barco. Hay embarcaciones a Cíes desde los puertos de Vigo, Cangas, Portonovo, Baiona o Sanxenxo y existen diferentes navieras que se encargan de este proceso.
Vista de la playa de Rodas desde el barco que llega a las Islas Cíes
Por la mañana, senderismo con vistas al Atlántico
Pasar la mañana recorriendo el archipiélago es uno de los mejores planes para disfrutar de las Cíes, sobre todo si sólo se dispone de un día para admirarlas. Las Islas ofrecen cuatro rutas diferentes, de distinta longitud y dificultad. No hay excusa para no explorarlas.
- Ruta do Alto do Príncipe
Si se dispone de poco tiempo para disfrutar de las Cíes a ruta do Alto do Príncipe es la ideal. A pesar de ser la más corta, permite disfrutar de la belleza de las islas en todo su esplendor. El punto de partida es la caseta de información, la ruta comienza al desviarse por el camino ubicado a la derecha. Desde ahí comienza una pendiente hacia la playa de Figueiras, que nos llevará por los acantilados de la Isla de Monteagudo.
Al final de la ruta se encuentra la Silla de la Reina, desde la que se puede disfrutar de una espectacular vista de los acantilados. Las puestas de sol desde este punto son impresionantes. El recorrido es de 1'7 km, y tiene una duración aproximada de 45 minutos. La dificultad es baja, por lo que es accesible para todo tipo de visitantes.
- Ruta do Faro das Cíes
Es la más popular y la más larga, son 3'5 km. Imprescindible para los que quieren disfrutar de las islas al máximo. Comienza en la caseta de información, fácil de encontrar desde el puerto en el que atraca el barco. El sendero es cuesta arriba, aunque el esfuerzo se verá recompensado al contemplar las extraordinarias vistas desde el faro. La playa de Rodas contrasta con el bosque que se adentra en el interior de la isla. El camping Cíes quedará atrás al poco de comenzar el paseo.
Tras unos 300 metros, se encuentra la playa da Nosa Señora. Antes de iniciar la pendiente que lleva hasta el Faro, se pueden encontrar diversas atracciones turísticas que ofrecen las Islas, como a Pedra da Campá o el castro de As Hortas -datado en la Edad de Bronce-.
La caminata durará alrededor de hora y media. La dificultad es media, aunque el tramo cuesta arriba puede dificultar el recorrido. No es circular, por que una vez que se llegue al faro será necesario desandar el camino. Desde lo alto, se puede disfrutar de unas impresionantes vistas de las Islas Cíes y la Ría de Vigo.
Vistas desde la ruta del Faro das Cíes
- Ruta do Faro do Peito
Al igual que en las rutas anteriores el punto de partida es la caseta de información de las Islas. Se dirige al norte por la playa de Figueiras. Después, continúa hacia A Valgada, una zona sin vegetación que antecede a la falda del alto de Monteagudo. A mitad de camino hay un cruce que ofrece dos posibilidades, visitar el observatorio de aves o descender hacia faro do Peito. Al levantar la vista al frente se encuentran los acantilados de la Costa Vella y, a lo lejos, la isla de Ons. El siguiente tramo de la ruta es un camino empedrado que conduce a una cueva marina conocida como la furna de Monteagudo. Desde la caseta de información hasta el Faro do Peito hay 2'5 km. El recorrido dura entre 45 minutos y una hora. La dificultad es media, lo que puede complicar un poco el camino.
- Ruta do Faro da Porta
Comparte parte del recorrido con la Ruta del Monte Faro. La diferencia llega en el cruce de la playa de Nosa Señora. A partir de ahí, continúa por el muelle de Carnacido. Después, una pendiente sube hacia el faro de A Porta, desde donde se puede contemplar el castro de As Hortas y el Faro de las Cíes. La dificultad de la ruta es baja. Son 2'6 km que tardan en recorrerse alrededor de una hora.
Después de caminar, una parada para reponer fuerzas
Después de una mañana de rutas y caminatas, es indispensable descansar. Las Islas Cíes ofrecen diversas opciones de bares y restaurantes en los que disfrutar de una buena comida. El camping del archipiélago tiene un restaurante propio, que está disponible para todos los visitantes de la isla. Aparte, las Cíes cuentan con otras opciones, como el Restaurante Serafín situado a escasos metros del camping y la Bocatería Begoña. Además, el camping tiene un supermercado.
Tarde de playa para finalizar la jornada
Vista panorámica de la playa de Rodas
Tras aprovechar la mañana caminando y descansar en la comida, es momento de disfrutar de las playas de las Islas Cíes. La más grande y conocida es la Playa de Rodas, es lo primero que se ve al desembarcar en la isla. Al final de este arenal se encuentra la Playa das Cunchas o dos Bolos. También se puede acceder a ella atravesando el viejo cementerio de la isla.
Playa das Cunchas o dos Bolos
En la Isla do Faro, aunque más pequeña y recogida, está la Playa da Nosa Señora, el lugar ideal para practicar buceo en las Cíes.
Playa da Nosa Señora
A continuación del muelle de Rodas se puede encontrar una pequeña cala llamada Playa de Areíña. Se accede a ella a través de un sendero situado a la derecha del restaurante.
Playa de Areíña
Al norte de esta isla está la Isla de Monteagudo, con las playas de Figueiras, es la única nudista del archipiélago.
Playa de Figueiras
La playa de Margaridas, de apenas 31 metros de longitud es una de las más tranquilas de la isla.
Playa de Margaridas
La Playa de Cantareira con sus característicos cantos rodados.
Playa da Cantareira
La más inaccesible, sólo se puede ir hasta ella en barco personal, es la playa de San Martiño ubicada en la isla homónima. Al estar aislada tiene un paisaje mucho más abrupto y virgen que las demás. El agua de estas playas es cristalina y, sobre todo, muy fría. La temperatura del agua no suele superar los 20ºC.
Playa de San Martiño
