Atracan un banco de Beade tras rociarlo con dos litros de gasolina

La oficina de Caixabank de Beade fue ayer objeto de un atraco, uno de los más inusuales que se recuerdan en la zona. Poco antes de las 12 horas, en un momento en el que no había clientes dentro de la sucursal, un hombre –al principio se creía que eran dos, pero los testigos sólo vieron a una persona en el coche que huyó– entró en la oficina al grito de “esto es un atraco”. Pero, en lugar de llevar un arma blanca o de fuego en la mano, lo que blandía el atracador era una botella de refresco de dos litros repleta de gasolina, la cual no dudó en vaciar sobre una de las mesas amenazando con prenderle fuego si no se le entregaban algún botín, salpicando levemente a la directora de la sucursal con el líquido inflamable.

Fue en ese momento cuando una vecina que se dirigía a hacer una gestión al banco, se dio cuenta de lo que ocurría y salió corriendo para entrar en el establecimiento de al lado al grito de “¡están atracando el banco!”, tras lo que pudieron dar aviso a la Policía.

El atraco no duró mucho más ante la amenaza de calcinar la oficina y el perpetrador logró escapar con un botín de 600 euros, según confirmaron fuentes policiales. El suceso se saldó, afortunadamente, sin que nadie resultase herido, aunque la oficina bancaria tuvo que suspender su actividad durante el resto del día, ya que el olor a carburante todavía persistía en el interior del local.

Hasta el lugar se desplazó una patrulla de la Policía Nacional, que se encuentra investigando los hechos. La Policía Científica tomó muestras tanto de la botella, que quedó tirada en el suelo, como de la mesa en la que vertió su contenido, por si pudiera ayudar en la identificación del atracador.

Por el momento no se han producido detenciones al respecto, si bien los agentes al cargo de la investigación buscan un Peugeot gris claro, que pudo ser identificado por varios testigos. La Policía cree que el presunto autor está vinculado con otros sucesos violentos, según informaron fuentes del cuerpo a Europa Press.

Es el segundo atraco realizado en Beade en cuestión de meses, tras el suceso ocurrido en una tienda de materiales de construcción a principios de septiembre. Preocupa en la parroquia esta escalada de delincuencia, sobre todo porque los dos últimos se produjeron a plena luz del día.