Ningún médico residente que esté actualmente formándose en los centros de salud verá peligrar su especialidad. Sin embargo, sí está en juego el número de plazas que se podrían ofrecer el próximo curso a los residentes de primer año. Los facultativos consideran que en la actual situación de sobredemanda no pueden garantizar una docencia de calidad y ya hay algunos que han anunciado su intención de renunciar.
Sobre esta medida, que se barajaba hace tiempo, no había acuerdo por lo que se sometió a votación: hubo 9 médicos que votaron a favor de dejar la docencia, 6 que votaron en contra y otros 15 que tomarían la decisión si la mayoría decidía que era adecuado. La docencia es voluntaria, no remunerada y en todos los casos vocacional. Uno de los docentes decía ayer que en una consulta que supera los 50 pacientes al día es muy difícil formar a un residente y que lo que no está dispuesto es a correr el riesgo de que se conviertan en mano de obra barata. “Voy a reunciar por esto”.
La asamblea de Primaria abordó también la situación que viven los centros que llevan un año sin jefes.n
