Atletismo

Navarrete: "Siempre busco saber dónde está mi límite"

Ester Navarrete (derecha) posa junto a sus compañeras con las medallas de plata por equipos.
photo_camera Ester Navarrete (derecha) posa junto a sus compañeras con las medallas de plata por equipos.
La viguesa está “muy contenta” por la plata colectiva en la Copa de Europa de 10.000

Ester Navarrete atraviesa un sensacional momento de forma. El pasado sábado, se colgó junto a sus compañeras de selección la medalla de plata por equipos en la Copa de Europa de 10.000, disputada en la localidad francesa de Pacé. Además, concluyó séptima, como mejor española, con un tiempo de 32:45.04. “Estoy muy contenta”, afirma un par de días después, ya de vuelta.  Pero lo que denota su gran condición es que la viguesa no se conforma. “La verdad que iba con la idea de atacar mi mejor marca personal e intentar llegar a los 32:00”, expresa.

Ese punto de ambición habla de una deportista con ilusión por seguir progresando. Con hambre. Algo muy a destacar teniendo en cuenta que Navarrete, de 33 años, ha sido madre hace algo más de dos.  Lejos de dejarlo, volvió más fuerte, establecida como internacional y con la mente y el cuerpo enfocados en batir sus mejores marcas. “Siempre quiero saber hasta dónde puedo llegar. Dónde está mi límite”, expresa con sinceridad. Ese pensamiento es una parte de su gasolina. La otra, probablemente más importante todavía, el amor de los suyos. “En mi casa tengo mucho apoyo por parte de mi familia y me gusta que mis padres, mi marido y mi hijo me vean dándolo todo. Por eso me los llevo a todas a partes. Me hacen querer seguir adelante”, proclama. 

Con ese chute de energía compitió a nivelo continental en Francia junto a compañeras. A todas las aventaja en edad y a todas las aventajó también en meta. “Al compartir tiempo con ellas, fui consciente de lo importante que es ir segura y saber lo que quieres en cada momento gracias a esa madurez”, explica. “La verdad que a veces lo valoro y sí que se nota la experiencia”, confirma, reflexiva. “No doy muchos consejos. Te preguntan a veces, pero ellas tienen su forma de hacer las cosas. La experiencia y el aprendizaje te lo dan las carreras y el tiempo”, añade.

Sobre la carrera en sí, Ester explica que “el día no era muy bueno para hacer marcas” y que, de hecho, “las carreras no fueron muy rápidas”. Eso sí, se muestra satisfecha de su trabajo, aunque se le haya resistido esa MMP. “Sé que en algún momento va a caer, pero por ahora se hace esperar”, subraya la atleta del Celta Femenino. 

Precisamente junto a sus compañeras célticas, Navarrete buscará en ascenso a División de Honor el próximo fin de semana. “No lo veo difícil, pero en nuestro deporte no siempre las cosas salen como esperas. Te lo juegas todo en un día, puede haber bajas de última hora... Tenemos un equipo muy bueno, muy luchador y creo que lo podemos conseguir”, reflexiona Ester, encantada con su regreso a casa después de unos años en el FC Barcelona. “Tenemos mucho compañerismo. Hemos hecho mucha piña. Aunque el atletismo sea un deporte individual, hay mucho apoyo de todas y cada una pone su granito. Eso provoca que te apetezca mucho ir a las ligas y dar lo mejor de ti”, confiesa la fondista internacional, plenamente establecida con la selección. “Es un orgullo. Significa que el trabajo realizado a lo largo de los meses se ve plasmado con estas convocatorias”, apostilla. 

Pero eso no para. Dos de los principales objetivos de Ester para esta temporada están citados: el ascenso del Celta y el asalto a su mejor marca en el 10.000. Este último no será sencillo de cumplir a corto plazo. “Es que casi no quedan carreras”, reconoce. Por eso, la atleta olívica gira su mirada hacia el 5.000, pero con idéntica meta. “Estamos intentando encontrar pruebas para aprovechar este pico de forma y mejorar mi marca”, anuncia. En esta mezcla exacta de condición, experiencia y ambición, Navarrete está lista para todo lo que venga. Los  límites están para encontrarlos.

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