Balonmano

Reencuentro de brasileñas en el derbi gallego de balonmano

Fermo, arriba a la izquierda, y Almeida, fila inferior en el centro, coincidieron en el Carcavel de Brasil.
photo_camera Fermo, arriba a la izquierda, y Almeida, fila inferior en el centro, coincidieron en el Cascavel de Brasil.

Las brasileñas Thais Fermo, de 27 años, y Andreza Almeida, de 25, se reencuentran en el derbi gallego como rivales tras coincidir en el Cascavel brasileño antes de viajar a Europa

Historias cruzadas, amistades, selecciones compartidas de base o de élite, cambios de equipos. Cada derbi gallego entre el Conservas Orbe Porriño y el Mecalia Atlético Guardés conlleva pequeñas y grandes historias de caminos vitales que se cruzan en una u otra dirección. No obstante, pocos podrían pensar que uno de ellos se sitúa a 9.000 kilómetros del Municipal de O Porriño, lugar en el que se disputa el derbi. 

Al igual que otras muchas se saludarán y, en su caso, con más cariño del habitual porque la porriñesa Thais Fermo, de 27 años, y la guardesa Andreza Costa Almeida, de 25, vivirán su primer partido de rivalidad frente a frente y lo hacen lejos, muy lejos, de la ciudad de Cascavel, en el sur de Brasil. En la región del Paraná, cerca de la frontera con Paraguay, ambas deportista compartieron conjunto en el Andebol Cascavel (2020/22) y, dos años después, se reencuentran como rivales. “Thais marchó antes que yo. Ella ya había terminado los estudios y yo los tenía que terminar”, explica la central del conjunto miñoto Andreza Almeida. Fermo indica que “compartimos momentos muy buenos. En Brasil el balonmano no es profesional y Andreza estaba centrada en poder ser profesional”, explica.

Precisamente, en España encontraron el lugar en el que dedicarse a su deporte, aunque Andreza Almeida pasó una campaña en Macedonia. Los caminos nunca se saben las curvas que conllevarán. “Pregunté a Thais si estaba cómoda aquí”, admite Andreza. La respuesta resultó positiva y se verán las caras por primera vez como rivales mañana. “Será raro verla enfrente, pero la amistad quedará fuera de la pista”, bromea la extremo del Porriño sobre su suelo particular.

Y, a nivel deportivo, describe con claridad a su oponente y amiga al indicar que “es muy buena compañera y persona. Tiene un uno contra uno muy fuerte, es una jugadora muy rápida”, indica sobre la central que milita en el Mecalia Atlético Guardés.

También describe con precisón Andreza a Fermo. “Es una jugadora muy rápida y muy buena a nivel defensivo. Cuando ataca, tiene una finalización óptima por el extremo, es muy inteligente. No sé como vuelve ahora de su lesión, pero estoy segura que jugará bien. Es muy lista”, relata. 

Ambas jugadoras llegan a la cita con ciertos problemas. Fermo sale de una lesión de ligamento cruzado, cuya recuperación se extendió más de lo previsto y, en la actualidad, padece problemas de isquiotibiles, que la merman. “Estoy cada vez más suelta y segura. Una lesión así te hace volver más fuerte y creo que así es. Estoy mejor física y mentalmente, pero es difícil saber cuándo podré volver al máximo. Poco a poco voy adquiriendo más minutos y espero que tras el parón de diciembre, pueda estarlo”, describe la extremo del Porriño. 

Por su parte, Andreza Almeida llegó comenzada la campaña por problemas con el visado. “El comienzo se me hizo complicado porque no estaba acostumbrada a jugar con las compañeras ni a hacerlo en España. Fui tomando el ritmo y entendiendo la forma de jugar. Ahora estoy más acostumbrada, estoy mejor que al inicio, pero todavía tengo que mejorar y lo seguiré haciendo”, describe. 

Así, dos brasileñas con paso por Cascavel se reencuentran mañana en un derbi gallego que “es el partido estrella, así me lo dijeron mis compañeras", admite Andreza Almeida. Fermo matiza que “quiero jugar. Un derbi en casa es bonito e ilusionante”. Una debutante y otra casi en los encuentros de rivalidad, pero ambas conocen ya la relevancia del enfrentamiento entre Porriño y Guardés. Una importancia que se interioriza pronto.

Te puede interesar