Dos pereginas de Madrid y Teruel valoran el recorrido a su paso por Covelo “no como turistas sino como caminantes”
La Vía Mariana se consolida en la agenda de caminantes más expertos que, atraídos por la riqueza natural e histórica del recorrido y la pureza del aire y los sonidos, se lanzan a superar este reto, con 18 etapas desde el Santuário de Nossa Senhora del Sameiro, en Braga, como punto de partida hasta Muxía, en A Coruña, como remate. Durante el largo recorrido, los caminantes se encuentran con lugares únicos alejados del ruido y de la masificación a los que solo se puede acceder a pie.
Y un buen ejemplo del perfil de peregrino profesional son María Pilar Ybarra, “Mapi”, y Marían Martín, que a su paso por el Concello de Covelo, en plena Vía Mariana por Galicia, descubrieron magníficos paisajes: la VMLG 07 Parada-Covelo, y la VMLG 08 Covelo-Estacas, con rincones de espectacular belleza tal y como los describen ambas peregrinas, que coinciden también en destacar que son “recorridos para expertos que sepan desarrollarse bien y tener estrategia para asumir cada tramo”. Ellas dos, son caminantes expertas que llevan más de 15 años recorriendo milles de kilómetros en toda España, Portugal y resto de Europa. Y para ambas, “la Vía Mariana y así la describen, es una maravilla porque la naturaleza y la espiritualidad se abrazan.
“Para mí -dice Mapi Ibarra, ”es un camino muy espiritual, y una ruta exigente y dura por lo que no está masificada y te permite un contacto más estrecho con la gente de las aldeas que nos recibe y nos ofrece su ayuda, se para a conversar y se interesa por nosotras”, relata esta madrileña entusiasta de la Vía Mariana, psicóloga y profesora de la Universidad Nacional de Educación la Distancia, UNED, para quien caminar “es un encuentro con el interior de cada uno, una búsqueda de calma que se puede practicar a cualquier edad eligiendo bien la ruta que se adapte a las condiciones de cada uno”.
Y en la misma línea de sensaciones, Marián, natural de Teruel, comparte en sus redes sociales “Marian YoSoy Peregrina”, las experiencias vividas a lo largo de los kms y hermosas estampas que simbolizan la belleza del recorrido. Ella, también prefiere alejarse de las vías masificadas para vivir una experiencia más íntima en la que fusionarse con el medio natural. “Sentir que perteneces a algo tan espectacular como la riqueza natural, es un privilegio que solo se puede conseguir caminando por vías que respeten la esencia de la naturaleza, las menos comerciales o transitadas, como la Vía Mariana, donde caminar sola, tiene muchos beneficios, como despertar los sentidos y conectar con los lugares y las personas, y es que, caminar no deja de ser una forma de vivir, que te permite no solo dormir un día en cada sitio, sino también sentirte parte y forma de cada uno de esos lugares". La Vía Mariana tiene otros tiempos, minutos y horas de calidad que te permiten reconciliarte con la vida”, expresa Mariam.
Para estas dos mujeres expertas en peregrinación, la Vía Mariana Luso-Galaica a su paso por los dos tramos de Covelo “no solo es bonita, es bellísima” señala Marián. Y de “todas las largas distancias que he caminado es de las más bonitas que he hecho por la implicación de la gente, el apoyo de los delegados de zona que sin saberlo están ahí”, comentario que comparte Mapi señalando que “son ángeles de la guarda que te ayudan a superar las posibles adversidades”. Y de los y las delegadas de zona, destacan su especial importancia al ser personas que conocen la vía, que ya la caminaron y saben donde están las dificultades, “son figuras fundamentales que te dan apoyo y están pendientes permitiéndote a la vez caminar libremente sin tener que marcar tiempos o cumplir objetivos”.
Pero las dos enamoradas de la Vía Mariana, no pasan por alto aspectos a mejorar en el recorrido, como el mantenimiento de los tramos y la señalización, para evitar momentos de duda y acertar con las decisiones. Ambas, Mapi Ybarra y Marián Martín, superaron los tramos de Covelo y vencieron la climatología adversa de estos días y valoran el patrimonio natural, histórico y etnográfico, “pero no como turistas de paso”, matiz que marca la diferencia y mejora la experiencia, señalan desde la Alcaldía de Covelo.
