Eduardo Coudet salió de Balaídos satisfecho con la victoria y con el juego de su equipo, aunque reconoció que, “de haber estado más finos, podríamos haber generado más en la segunda parte”.
“Ganar en casa era importante para hacernos fuertes y son tres puntos muy buenos ante un rival difícil, que salta mucho las líneas y que tiene muy bien trabajado el segundo balón y la pelota aérea. Y me parece que pudimos contrarrestarlo bien”, empezó diciendo el entrenador del Celta en la rueda de prensa posterior al encuentro.
Coudet destacó que en los diez minutos en los que Hugo Mallo y Santi Mina marcaron los dos goles, “tuvimos un buen tramo, hicimos la diferencia y después no queríamos sufrir. Queríamos estar con la línea corta, que no nos centraran, hacernos más anchos, y creo que lo hicimos bien. Se dio así y no sufrimos. Tampoco estuvimos finos para generar más en la segunda parte con espacios, pero la primera intención era no sufrir y lo hicimos bien”.
Con la victoria de ayer, el equipo vigués suma ya 26 puntos y está nueve por encima de la zona de descenso, pero el preparador argentino no quiso separarse de su discurso habitual y eludió opinar sobre la posibilidad de luchar por puestos europeos. “Yo lo que veo es que hasta el partido con la Real Sociedad, saco aparte el de Copa, el equipo sabe a lo que juega e intenta sostener una idea, en casa y fuera. Ante la Real no generamos ocasiones de gol, pero (el Celta) es un equipo por momentos dominante, que sostiene la intención. A veces nos sale mejor, a veces no, pero lo intentamos siempre”, explicó Coudet, que insistió en que “hicimos un partido inteligente. Queríamos estar con la línea corta, que no nos centraran mucho desde los costados, y no sufrir”.
