Vigo colabora con los trabajos que coordina el delegado de Medio Ambiente en coordinación con la Guardia Civil y Policía
Controlada en parte la situación de emergencia por los cinco grandes incendios que asolaron Vigo y su área el domingo, la Fiscalía ha iniciado una investigación a gran escala para esclarecer sus causas y encontrar posibles autores. Fuentes de la Fiscalía Superior de Xustiza de Galicia confirmaron que dicha investigación se encuentra en fase inicial y se lleva a cabo de forma conjunta con la Guardia Civil .
El fiscal delegado autonómico de Medio Ambiente, Álvaro García Ortiz, con una larga experiencia en la investigación de incendios, entre ellos la oleada más grave de 2006, coordina los trabajos. En aquella ocasión, determinó la inexistencia de pruebas sobre tramas o de terrorismo incendiario, que nunca existieron, ni tampoco que determinados incendios pretendieran causar alarma social.
La Fiscalía de Área de Vigo y la provincial colaboran en los trabajos, informaron las mismas fuentes, con toda la documentación que se recabará tanto de la Guardia Civil como de la Policía Nacional.
De momento no hay ninguna detención al respecto, ni por parte de la Policía ni de la Guardia Civil. Fuentes del Instituto Armado informaron de que se trata de una labor muy compleja que acaba de comenzar. De hecho, dos días después del peor jornada incendiaria en la que perdieron la vida tres personas, todavía los efectivos están desbordados por la multitud de frentes abiertos.
Ayer, continuaban activos incendios en Ponteareas, Nigrán, Salvaterra y Fornelos y estabilizados uno en Salceda de Caselas y otro en Gondomar, el de Morgadáns, que se inició a primera hora del domingo, mientras que se daba por controlados uno en As Neves, otro en Baiona, uno en Mondariz, otro en Mos y dos en Ponteareas.
Ante esta situación, las investigaciones de los distintos focos están pendientes de la extinción completa.
En el entorno de Vigo, tras un día entero de lluvia, los trabajos de inspección se pudieron llevar a cabo de forma más pormenorizada y en Chandebrito, la Policía judicial de la Guardia Civil tardó horas en poder llegar hasta el lugar donde dos mujeres fallecieron.
La calcinación de los cadáveres de Chandebrito impide la prueba de ADN
La autopsia realizada a las dos mujeres fallecidas en el interior de una furgoneta en Chandebrito, Nigrán, en la tarde del domingo, confirma que ambas murieron calcinadas. El estado en el que quedaron los cuerpos, reducidos prácticamente a cenizas y huesos, refleja que pudieron estar ardiendo durante horas sin que se haya podido confirmar una asfixia por humo anterior. De hecho, la identificación de los dos cuerpos no se podrá llevar a cabo mediante las pruebas de ADN, si bien los forenses han presentado al juzgado otro tipo de datos que ratificaría dicha identificación.
Las patologías que ambas mujeres, de 78 y 86 años presentaban, facilitaron la comprobación. Una de ellas llevaba un marcapasos, mientras que otra padecía una dolencia hepática que se pudo confirmar pese al estado del cadáver. A eso se sumaría la declaración de la persona que conducía la furgoneta y otros testimonios. Pese a todo, el juzgado todavía espera el informe definitivo para autorizar su enterramiento. Sí hubo ayer autorización de licencia de inhumación por parte de Instrucción 8 para el vecino de San Andrés de Comesaña fallecido en la noche del domingo tras precipitarse por un desnivel de cuatro metros cuando acudía a ayudar a una vecina durante el incendio.
La autopsia confirma que la causa de la muerte fue el fuerte impacto que recibió en la cabeza. Alberto Castromil, de 70 años, no presentaba síntomas de intoxicación por humo. La caída, accidental, le sobrevino antes de que el intenso humo que se respiraba en la zona donde falleció pudiera llegar a afectarle.
El hombre había acudido a la vivienda de una vecina, que previamente había estado en su casa ayudando por la cercanía de las llamas, para avisarla y echar una mano, pero la mujer ya no estaba cuando acudió.
Alberto Castromil fue enterrado ayer en el cementerio de Pereiró, mientras que las otras dos víctimas tendrán que esperar algo más para recibir sepultura en el camposanto de Nigrán.
Fuentes del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia confirmaron por otra parte que el juzgado no ha realizado nuevas diligencias hasta el momento.
Instrucción 8, en funciones de guardia el día de los hechos, asumió los tres fallecimientos que se produjeron a consecuencia de la situación provocada por los incendios. Las mismas fuentes también descartaron por el momento que se hayan producido detenciones Aunque la muerte del vecino de Vigo fue accidental, tal y como confirma la autopsia, dicho accidente se produjo en un contexto concreto de un incendio forestal que causó pánico en la zona y más concretamente derivó en un intenso humo que pudo ser la causa principal del fatal acontecimiento. Así al menos lo aseguraban varios testigos, que relataban a este diario cómo sobre las diez de la noche, cuando se produjo el suceso, la zona de Rial en San Andrés estaba acorralada por las llamas y el humo que impedía respirar y dificultaba por completo la visión.
Asimismo, los distintos testimonios corroborarían las escenas de nerviosismo y pánico que se dieron durante horas ante las cercanías de las llamas y el temor a que las viviendas pudieran quedar arrasadas lo que obligó a algunos residentes a abandonar sus casas y huir de la zona en peligro para evitar sufrir daños.n
