Povisa ha puesto en marcha un novedoso protocolo de Recuperación Intensificada de Cirugía Abdominal (RICA), cuyo objetivo es reducir sustancialmente el impacto de las intervenciones quirúrgicas y las complicaciones postquirúrgicas, logrando así una mejor recuperación de los pacientes.
El nuevo protocolo, según informó este hospital, está coordinado por Cirugía General y cuenta con la participación de Anestesiología, Enfermería, Hematología, Calidad e Informática. Entre otros aspectos, otorga un importante protagonismo a los propios pacientes y sus familias, y pone en marcha una serie de medidas previas a la cirugía, durante la propia intervención, la estancia hospitalaria y también en las recomendaciones previas al alta y durante el postoperatorio domiciliario.
Asesoramiento novedoso
Algunas de estas medidas sorprenden por su novedad e incluso por romper con pautas comúnmente establecidas. Estas novedades comienzan ya en la fase previa a la intervención, donde se inicia un proceso de información exhaustiva y continua para el paciente, a través de los equipos de Anestesia, Cirugía General y Enfermería, e incluye recomendaciones para unos hábitos de vida saludables con el fin de llegar en las mejores condiciones físicas posibles a la intervención.
Durante la operación, el nuevo protocolo busca evitar el uso de drenajes y sondas nasogástricas de forma rutinaria, habituales en la cirugía tradicional, ya que no son necesarias en la mayoría de los casos, evitando las molestias que estos dispositivos conllevan. Ya en planta, las novedades son también llamativas y van dirigidas a conseguir una movilización precoz del paciente. Este protocolo ya ha sido puesto en marcha, con una gran acogida por parte de los pacientes, en cirugía colorrectal y se irá extendiendo progresivamente a otros servicios. n
