La ANC aprovechó las concentraciones para pedir donaciones para su "caja de solidaridad"
n n n Miles de personas, 200.000 según la Guardia Urbana, se concentraron ayer en el centro de Barcelona para pedir la puesta en libertad de los presidentes de la ANC, Jordi Sànchez, y de Òmnium, Jordi Cuixart, y denunciar su condición de "presos políticos" por haber promovido el proceso independentista. Muchos de los concentrados, convocados por las entidades soberanistas en el tramo de Diagonal entre Passeig de Gràcia y la plaza Francesc Macià, sostenían velas encendidas, distribuidas en buena medida por la ANC, que ha aprovechado para pedir donaciones para la caja de solidaridad creada en ayuda a los cargos con problemas judiciales por su papel en el proceso catalán.
La movilización, que se repetía en otros puntos de Cataluña y que era continuación de las de la noche del lunes y ater por la mañana, fue convocada después de que la juez de la Audiencia Nacional Carmen Lamela enviara a prisión sin fianza a Sànchez y Cuixart por sedición, por haber "promovido" el asedio a la Guardia Civil el 20 de septiembre durante una operación para impedir el referéndum del 1-O. Entre los concentrados en Barcelona había numerosos cargos soberanistas como Artur Mas, Marta Pascal, David Bonvehí y Neus Munté (PDeCAT), Marta Rovira, Gabriel Rufián y Lluís Llach (ERC), así como Anna Gabriel, Mireia Vehí, Joan Garriga o Núria Gibert (CUP) y consellers como Santi Vila o Joaquim Forn.
Por la mañana el presidente de la Generalitat; el vicepresidente del Govern, Oriol Junqueras, y diversos consellers, junto a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau se conntrabana en la plaza Sant Jaume de Barcelona. La de la plaza de Sant Jaume era la concentración con mayor presencia institucional, si bien había convocatoria ante los lugares de trabajo en todos los municipios catalanes.
Frente a las puertas del Parlament se concentraban la presidenta de la Cámara catalana, Carme Forcadell; miembros de la Mesa como Lluís Guinó, Anna Simó o Joan Josep Nuet; diputados de Junts pel Sí, como Lluís Corominas, Marta Rovira, Marta Pascal y Antoni Castellà; de Catalunya Sí Que Es Pot, como Lluís Rabell o Joan Coscubiela; y de la CUP, como Mireia Boya o Gabriela Serra.
Una de las concentraciones más concurridas era la celebrada frente al Ayuntamiento de Girona, que reunía a unas 2.500 personas, según la Policía Local, y donde la alcaldesa, Marta Madrenas, acompañada por representantes municipales y del presidente de la Diputación Provincial, Pere Vila, leía un manifiesto consensuado por la Asociación Catalana de Municipios y la Asociación de Municipios por la independencia.n
