MANUEL AGUDO 'NOLITO'. Atacante del Celta

"Estoy muy bien aquí, pero no soy tonto y al principio hubo críticas"

Nolito conduce el balón durante el partido ante el Málaga.
photo_camera Nolito conduce el balón durante el partido ante el Málaga.

Manuel Agudo 'Nolito' (Sanlúcar de Barrameda, 1986) vive en estado de gracia. Se sabe importante para el equipo y sueña con la séptima plaza, pero también recuerda sus inicios en Vigo, cuando no todo era color de rosa. Y el futuro, "ya se verá".

¿Fue el gol un premio a su fe  y a la del equipo?
Sí y un premio en general a toda la temporada que llevamos, que hemos hecho partidos buenos y no los hemos ganado. Un premio también a la constancia, porque aunque no jugamos un gran partido sí que, como decimos en mi pueblo, estuvimos dando la lata buscando el gol. Tuvimos fe en que llegaría, llegó y contento por esos tres puntos.

Se merecía una celebración especial como la que tuvo.
Sí que merecía la pena. Cogí el banderín, toqué la guitarra flamenca y 'Cabra' me acompañó tocando el cajón. Muy contento por el gol, por la victoria y por la celebración también.

Once goles, once asistencias al menos. Son cifras de estrella de la categoría. ¿Se siente estrella?
Sinceramente, no. Soy futbolista cuando estoy en el terreno de juego pero cuando me voy a mi casa soy una persona normal y corriente y en lo que menos pienso es en el fútbol. Pienso en disfrutar, distraerme e intentar vivir lo mejor posible.

Dentro del campo ahora mismo ¿le sale todo?
No. Exceptuando alguna pequeña racha, yo siempre intento jugar bien para el equipo. Está claro que no siempre te salen las cosas bien, pero intentaré siempre jugar así. Siento que cada vez que juegue voy a tener oportunidad de marcar gol, otra cosa es que lo meta o no. Tengo confianza en mí, siempre la he tenido y la tendré, vayan las cosas como vayan.

Pero más allá de los goles, ¿se siente con más confianza para hacer genialidades?
Sí. Está claro que cuando uno está con confianza... Siempre he dicho que lo importante en un futbolista es la cabeza. Si la tienes bien, en el campo te sale todo. A veces tienes problemas familiares o de otro tipo y no estás metido en el campo. Somos personas y es lógico que no puedas estar todo el año ni todos los partidos bien. No lo están ni Messi ni Cristiano.

Definían hace poco en un periódico nacional el juego de ataque del Celta con la idea de que el balón llegaba a usted y usted decidía qué hacer. ¿Se siente con ese peso en el equipo?
No. Sí que siento que mis compañeros confían en mí y cada vez que recibo el balón intento hacerlo lo mejor posible para el equipo, a veces de manera individual y a veces colectivamente. Este año estamos haciendo una buena temporada y es mérito del grupo. Sea cual sea el rival, el equipo está haciendo muchos partidos muy buenos, tenemos grandes jugadores.

¿Berizzo le da libertad?
Berizzo me da libertad y Luis Enrique también me la daba. La libertad de, a la hora de tener el balón y atacar, jugar como sé, para qué voy a cambiar. Confío en mí. Intento hacer mi fútbol, el que he hecho toda la vida en todas las categorías y en todos los equipos.

¿Y qué le ha aportado Berizzo?
Mucha confianza. Ha confiado en mí desde el principio, habla muchísimo conmigo, tanto en lo bueno como en lo malo. Me pide que defienda mucho, porque el ataque ya lo tengo. Me aporta esa tranquilidad y esa confianza.

La séptima plaza se ha puesto a tiro, ¿ve factible lograrla pese al calendario que queda?
El calendario es complicado pero todo en la vida es factible. Vamos a intentar competir con los otros cuatro equipos y ya veremos qué sucede.

¿Es el Athletic el rival más peligroso en esa pelea por ser séptimo?
Sí, con el Málaga. Los dos tienen muy buen equipo. Y tanto Rayo como Espanyol también están metidos en la pelea.
¿Siente que con cada gol que marca sube su cotización?
No lo sé, puede ser. Al final, como decía un amigo, un jugador vale lo que quieran pagar por él. 

¿Qué se ha dado aquí en Vigo para que viva el mejor momento de su carrera? Creo yo que es su mejor momento, no sé si está de acuerdo.
Sí, yo también lo creo. Ahora van las cosas bien, pero el principio fue duro porque hubo muchas críticas y muchas dudas sobre mí. No era todo bonito y no era Nolito quédate, Nolito no te vayas… Era cómo has firmado a Nolito por dos millones y medio. No soy tonto ni ciego. Son cosas que pasan en el fútbol. Ni antes era tan malo ni ahora tan bueno. El fútbol no tiene memoria y, como he dicho, un día eres dios y otro un mojón. Sí puedo decir que aquí estoy muy bien, tengo amigos que son como de la familia, mi mujer y mi hija están bien, me siento jugador y me están saliendo las cosas bien.

Para irse, ¿la única tentación sería poder ganar títulos?
No. Ya veremos lo que pasa pero es muy difícil ganar títulos y nadie te lo asegura. Si te vas por ejemplo al Barcelona, quizás tienes muchas posibilidades de hacerlo, pero nadie te lo asegura. Hay mucha competitividad, muchos equipos que tienen muchísimo dinero y no juegan ni Liga de Campeones ni Uefa.

Entonces, ¿para irse qué pediría?
Para irme… La verdad es que no pienso en irme a día de hoy. Lo que tenga que pasar pasará y siempre digo que las cosas pasan por algo. Igual que fui a Granada o igual que vine aquí, que mucha gente me criticó y dijo cómo iba a un Celta que iba a pelear por no descender. Uno tiene que tomar decisiones, a veces te puedes equivocar y a veces acertar. Pero nunca me he arrepentido de las decisiones que he tomado. Ahora mismo estoy feliz aquí y ya veremos lo que pasa.n

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