El entrenador del Celta asegura que "no querría acelerar su proceso de adaptación apurándolo a debutar"
A falta de tres días para del debut liguero, el técnico del Celta, Eduardo Berizzo, va imaginando el once inicial con el que se efrentará el próximo domingo ante el Getafe. Y, aunque no quiere ser taxativo en sus afirmaciones, reconoce que, de entrada, Nemanja Radoja no cuenta con muchas opciones de ser el elegido para ejercer de pivote en el centro del campo.
El serbio, último fichaje del mercado veraniego hasta la fecha, llega para ejercer de mediocentro defensivo ante la baja por lesión de Borja Oubiña, que estará ausente los próximos cuatro meses. Sin embargo, su tardía incorporación –no se incorporó al grupo hasta la semana pasada– y el buen rendimiento del canterano Borja Fernández le hacen partir desde un segundo plano en este inicio liguero, aunque está llamado a ocupar el primer plano.
Cuando se le pregunta sobre la posibilidad de que Radoja juegue ya este domingo, Berizzo se muestra muy cauto. "Podría jugar, pero creo que también necesita tiempo de adaptación. No querría acelerar ese proceso apurándolo a debutar o a jugar. Si creemos el fin de semana que está listo, podrá participar. Si no, encontraremos en Borja, en Krohn o en cualquier otro futbolista esa posición en el campo", apunta el técnico celeste.
La barrera del idioma
Abundando en esta idea, el entrenador argentino llama la atención sobre la paciencia imprescindible que habrá que tener con un futbolista joven, que sale por primera vez de su país y que tiene una evidente barrera idiomática al no hablar ni castellano ni inglés. Por eso, Berrizo comenta que "sí creo que el equipo necesita hacerlo sentir cómodo porque para él no es fácil la adaptación. Ha llegado hace una semana, todo es nuevo, el idioma… Uno debe sentirse cómodo dentro del equipo antes de poder debutar", concluye.n
