Vigozoo estrena recinto para las tortugas exóticas de agua dulce

Las tortugas de agua de Vigozooya tienen un hábitat propio, montado en la antigua instalación de las aves acuáticas. Son más de 600 metros cuadrados de charcas con distintas profundidades y zonas con vegetación que permitirán aumentar la capacidad de alojamiento del parque. Son los animales más abundantes en el parque, que acoge hasta nueve especies diferentes. Aumentan cada año con el programa de control y gestión de especies exóticas invasoras para evitar que las mascotas sean liberadas en la naturaleza, convirtiéndose en una amenaza para la fauna autóctona. En los 17 años que lleva activo, los técnicos del zoo dieron cobijo a 949 ejemplares, con una media de 50 al año. Las más numerosas son las denominadas Orejas Rojas de Florida.

Todo parece indicar que la donación de estos animales continuará, ya que según las encuestas realizadas por Vigozoo en los centros escolares en la última década, calculan que en Vigo hay cerca de 100.000 tortugas de agua dulce como mascotas. “Se adquieren ejemplares jóvenes y de pequeño tamaño, el problema viene cuando crecen, requieren cuidados diarios y se suma a una esperanza de vida larga, que oscila entre los 20 y 40 años, lo que provoca que los propietarios se cansen y busquen una salida para ellas”, apuntan los responsables del programa de control.

Este nuevo recinto sustituye al río de los gamos, que junto al estanque de la entrada, era su ubicación temporal.

El inventario de animales cedidos se lleva a cabo en el área de conservación y son incorporados al registro de la colección zoológica, diferenciados del resto. Entre las especies invasoras, además de las Orejas Rojas (Trachemys scripta scripta) también hay del subtipo troosti, elegans e híbrida; las Pseudemys nelsoni, las Mauremys reevesii, Graptemys pseudogeografica y la Pseudemys concinna, todas procedentes de América, Asia o África.

Entre los galápagos más vistosos del parque está el ejemplar de esporas africana (Centrochelys sulcata), acomodada en la primera planta del Exotarium. Llego en 2003, tiene más de 20 años y supera los 35 kilos (en libertad puede pasar de los 100 kilos).

También de tierra son las del género testudo. En Vigozoo hay de cuatro especies diferentes: mora, griega, mediterránea y rusa. Están bajo amenaza de extinción. Son pequeñas y herbívoras.

En los terrarios del parque se distinguen las tortugas de patas rojas. Con el caparazón oscuro y las areolas amarillas son muy llamativas, al igual que la pintada del bosque, procedente de Centroamérica, una de las pocas omnívoras, que también es invasora.

Nueva cartelería sobre el problema de liberar especies exóticas

Vigozoo renovó la cartelería informativa sobre la amenaza de las tortugas exóticas para la fauna autóctona. Además de empobrecer la biodiversidad local, expulsa a la especie gallega (sapoconcho común). Para evitarlo, Vigozoo recoge a las mascotas que ya no se puedan cuidar a través de un programa puesto en marcha en 2006. El propietario debe comunicar la petición por correo electrónico, enviando fotografías que permitan identificar la especie. Si se admite, tendrá que cubrir una ficha de registro con la entrega del animal.

Una vez en Vigozoo, la tortuga es examinada por el veterinario y marcados de forma individual. Después queda en cuarentena en la zona de hospitalización. Se le debe mantener el alimento habitual hasta el momento por lo que el dueño debe ceder un paquete. Mientras son pequeños son acomodados en un espacio interior para favorecer la climatación.