Vigo estrena el AVE semidirecto, aún con parada en Pontevedra

Vigo estrena hoy AVE casi directo, el primero que bajará realmente de las cuatro horas -en teoría, tres horas y 50 minutos -al no hacer paradas más que en Pontevedra, Ourense y Zamora, suprimiendo el resto de estaciones, lo que ha provocado un terremoto en Ourense y otro en Castilla y León. El debut lo hace hoy a las seis de la mañana el AVE que sale de Urzaiz y llegará a Madrid unos diez minutos antes de las diez de la mañana, al menos sobre el papel. Otros tres AVE -se incrementan frecuencias y cambian las horas- partirán desde la terminal de Urzaiz a lo largo del día, con tiempos algo superiores, entre tres horas y 53 minutos y cuatro horas y 8 minutos, parando en Santiago e incluso en Vilagarcía en un caso. Un AVLO, el tren rápido de bajo coste, realizará el servicio en cuatro horas y 25 minutos y este sí que hará todo el recorrido completo, deteniéndose en Vilagarcía, Santiago, A Gudiña, Sanabria y Medina del Campo, además de Pontevedra, Ourense y Zamora, que se incluyen en todos los casos. Por tanto, ninguno de los AVE oficiales parará a partir de ahora en A Gudiña o Sanabria y solo algunos en Vilagarcía y Santiago. En cambio, todos los trenes de alta velocidad continuará teniendo su primera parada a los 25 kilómetros de salir de la estación de origen, en Pontevedra, un caso único no solo en España sino en todo el mundo.

El compromiso del Ministerio de Transportes, reafirmado por su actual titular, Óscar Puentes, es hacer Vigo-Madrid en tres horas y 35 minutos, lo que no resulta posible con el trayecto y configuración actual. El alcalde y el PP coincidieron en reclamar que haya un quinto AVE directo desde Vigo a Madrid, sin detenerse más que en Taboadela, en las proximidades de Ourense, para hacer el cambio de ancho (en realidad no para, pero disminuye la velocidad). Solo así podría al menos un tren cumplir con la promesa horaria. Las otras posibilidades, la famosa variante de Cerdedo o por el Miño con la salida sur, están muy lejos de realizarse. El cambio de horario en la línea de alta velocidad que Renfe aplica desde hoy supondrá para Vigo más frecuencias y reducir la duración del viaje, pero desde Ourense -usuarios, alcaldes- es visto como un recorte sin precedentes tanto en servicios y calidad para la provincia. Destacan que la pérdida de frecuencias con parada en A Gudiña dejará a miles de usuarios sin los trenes que les servían a sus propósitos de movilidad laboral, tanto con Ourense como con Madrid. Para la estación de A Gudiña-Porta de Galicia supondrá en total la pérdida de 16 trenes semanales, dejando esa comarca con el mismo número de frecuencias que tenía a principios de siglo circulando por la vieja línea de Zamora. Hasta el viernes, en la estación Porta de Galicia paraban cuatro trenes con destino a Madrid y cinco procedentes de su estación de Chamartín entre lunes y viernes y tres por sentido sábados y domingos.

A partir del nuevo horario serán tres trenes de ida y otros tantos de vuelta todos los días, salvo los domingos que serán dos. Este tijeretazo a los servicios de alta velocidad con A Gudiña se ve amplificado por el hecho de se suprimen aquellos trenes que tenían más interés para los usuarios de esa estación: los que permitían un viaje matinal a Madrid para hacer negocios y gestiones y regresar en el mismo día y también los que facilitaban la movilidad entre A Gudiña y Ourense a trabajadores, estudiantes, pacientes que iban a consultas médicas, etcétera, dado que todos los trenes suprimidos estaban sinergiados como obligación de servicio público, facilitando el uso de bonos gratuitos, como el resto de los servicios Avant en la misma línea entre Ourense y Santiago. Destacan asimismo que los 3,2 millones que costó la estación Porta de Galicia fue la inversión más rentable de ADIF por el retorno de viajeros que supuso.