Una tortilla gigante de 1.700 huevos por los 25 años de Alento

La asociación viguesa de daño cerebral adquirido, que convirtió Navia en una fiesta popular con música, talleres infantiles y espectáculos

Los cocineros con la tortilla gigante ya terminada.
Los cocineros con la tortilla gigante ya terminada. | Jorge Santomé

Una grúa de seis metros, una sartén gigantesca y una multitud esperando su ración: así vivió Vigo ayer la elaboración de la tortilla más grande de su historia. Fue el plato fuerte, literal y figuradamente, del 25 aniversario de Alento, la asociación viguesa de daño cerebral adquirido, que convirtió el barrio de Navia en una gran fiesta popular.

Desde las cinco de la tarde, la rúa Pedra Seixa se transformó en un escenario abierto al público, con pasacalles, conciertos, talleres y actividades familiares. El grupo de percusión Lenha Verde abrió la jornada recorriendo las calles del barrio, mientras la Coral de Teis animaba la zona cero del evento y se abrían las puertas del centro para dar a conocer su trabajo.

La tortilla gigante comenzó a cocinarse a las seis de la tarde, en una operación retransmitida en pantalla gigante y dirigida por el equipo de El Huevo de la Abuela, empresa que ostenta el récord Guinness en esta especialidad. La preparación llevó tiempo, trabajo y mucha cantidad de todos los productos. Se utilizaron 1.700 huevos, 150 kilos de patata, 30 litros de aceite, 3 kilos de sal y cebolla “al gusto”. Uno de los momentos más esperados llegó hacia las ocho, cuando la tortilla fue volteada con ayuda de una grúa de seis metros ante el aplauso del público. A continuación, se sirvieron las primeras raciones, tras las intervenciones institucionales. En total se repartieron alrededor de un millar de raciones.

Durante toda la jornada hubo talleres infantiles de chapas y pulseras organizados por Cocofante, un circuito de bicis y triciclos adaptados promovido por Discamino, mercadillo solidario, animación con DJ, cantina y foodtrucks. El mago Abraitz actuó a media tarde y después lo hizo Xulio Merino. El grupo local El Síndrome de Penny Lane cerró el programa en el escenario principal.

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