Teleco trabaja en Vigo para salir del bache y recuperar el interés

Tras el proceso ordinario de matriculación el grado de Ingeniería de Telecomunicación de la UVigo –uno de los más punteros de la institución– dejó libres 31 de las 130 plazas que oferta y el rector vigués, Manuel Reigosa, expresó su preocupación ante estos datos en el Consello de Goberno celebrado el lunes. Ahora, la directora de la Escuela de Ingeniería de Telecomunicación, Rebeca Díaz, recoge el guante y comparte esta inquietud, que achaca, entre otros factores, a “que han surgido titulaciones muy específicas que preparan para aspectos tecnológicos muy concretos y los estudiantes parece que prefieren esa especialización temprana”.

Es ahí donde el histórico grado de la UVigo –a día de hoy es la única universidad del sistema gallego que lo oferta– entra en juego, ya que como recuerda Díaz, “una preparación como la que damos en Teleco, que cubre aspectos de electrónica, comunicación, programación, radio y procesado de señal hace que la gente que sale de esta titulación esté preparada para los vaivenes y cambios tecnológicos que se produzcan”.

De hecho, las empresas buscan constantemente perfiles como este hasta el punto de asociarse con la propia escuela para facilitar esta transición a través del proyecto Conexión Teleco. Así, este bajón en el interés por parte de los estudiantes no se corresponde con la demanda empresarial, que “sufre cambios tecnológicos constantemente en el sector TIC (tecnologías de la información y la comunicación) para los que los alumnos de Teleco salen muy bien preparados”. Por esta razón, para mitigar este desinterés que en la escuela ven con un “bache” –eso sí, con la preocupación que merece–, hay en marcha múltiples campañas divulgativas para visibilizar la profesión, entre ellas, charlas en colegios e institutos de toda Galicia: “La gente tiene que saber que la formación aquí es solvente y garantiza la empleabilidad”, sostiene Díaz.

En cuanto a esto último, la directora de la escuela de Telecomunicación asegura que “quien no está trabajando al llegar al 4º curso de grado es porque ha elegido seguir formándose”, ya que lo usual es que los estudiantes se queden a trabajar en la empresa donde hacen las prácticas al llegar al tercer año.