San Rafael lanza un proyecto para fomentar la autonomía de personas con discapacidad intelectual

El Hogar y Clínica San Rafael lanzó un proyecto que promueve una vida más independiente entre las personas con discapacidad intelectual.

Explican que el proyecto, denominado Viver, apuesta por un modelo de apoyo centrado en la persona, que se aleja de la institucionalización tradicional y que está más próximo a los “entornos reales” de vida y participación comunitaria.

Según explican, es una nueva forma de acompañar a las personas con discapacidad intelectual que asumen el control sobre sus vidas y en sus decisiones cotidianas.

Uno de los recursos es la vivienda en comunidad que tienen en Gran Vía y que se utiliza para que un grupo de cinco personas del área residencial puedan dar el paso hacia una vida más autónoma, con apoyos personalizados y en un entorno incluso.

Antes de eso, había una cuidadora que visitaba puntualmente a los usuarios del piso compartido para organizarles el día a día. Ahora la atención es más individualizada y personalizada. Se analizan las prioridades y necesidades de cada uno y se buscan alternativas de forma individual. De esto se encargan una integradora social y una educadora social.

Además, se puso en marcha un programa de acompañamiento en comunidad para otras diez personas del centro que ya están trabajando en sus planes de desarrollo personal en diferentes ámbitos: social, laboral, emocional y espiritual.

A medida que las personas participantes avancen en la consecución de objetivos personales y generen rutinas de autonomía compatibles con la reducción de la necesidad de apoyos, se irán integrando o rotando nuevas personas participantes al proyecto para abarcar al mayor número de población.

Uno de los usuarios del piso compartido, José Siota, aseguró que “estoy muy ilusionado porque esta experiencia me va a ayudar a tener una vida más independiente. Sé que voy a aprender muchas cosas nuevas que serán muy útiles para mi día a día”.