Renfe sopesa implantar los trenes AVE para el Eje Atlántico

La operadora ferroviaria Renfe estudia ampliar los servicios por el Eje Atlántico implantando trenes Talgo Avril S-106 (los AVE a Madrid) en algunos servicios ocasionales del Media Distancia. En una carta de su presidente, Álvaro Fernández Heredia, al sindicato ferroviario CGT, aseguran que se encuentran analizando la posibilidad de poner en funcionamiento los S-106 para la Media Distancia, debido a su adaptabilidad en todos los anchos de vía posibles. Sin embargo, existen dos factores que pueden echar para atrás esta posibilidad: que no se garantice la viabilidad técnica y operativa (de ahí el análisis actual) y contar con esa clase de trenes en un corto periodo de tiempo. Esta última sí puede tener respuesta tras la retirada de varios convoyes S-106 de Cataluña ante las continuas quejas de sus usuarios, o buscar un sistema que permita ‘reciclar’ el tren de alta velocidad para que también realice algunos servicios por el Eje Atlántico.

El sindicato CGT emitió un escrito el pasado mes de septiembre donde mostraba su preocupación por la saturación de la conexión entre Vigo y Coruña, sobre todo en los primeros servicios del día para desplazamientos laborales y estudiantiles. Con ello, solicitaron que los S-106 actuales puedan aprovechar su llegada a Vigo o Coruña desde Madrid y circular por el Eje Atlántico. Este cambio, de darse, incrementaría las plazas ofertadas. Pasaría de las 281 plazas que cuenta el actual S-121 (560 si se realiza en doble composición) a los 581 asientos que componen el S-106 en su versión ‘lowcost’. No obstante, este aumento de plazas, según indica Renfe, se encuentra regulado por la OSP vigente a través del Ministerio de Transportes y se requiere de su visto bueno para ampliar el servicio. Se ha intentado con anterioridad modificar ese contrato, sin éxito, y proceden a un segundo intento tras detectar un aumento de la demanda en el Vigo-A Coruña.

Exigen más servicios para la conexión regional

El sindicato ferroviario CGT exigió a Renfe que refuerce los trenes que realizan el servicio Regional entre Vigo-Guixar y A Coruña, con parada en varias estaciones de municipios de pequeño tamaño. Piden que aumenten la disponibilidad de los trenes diésel S-599, encargados de este trayecto y que muchos de ellos se encuentran en el taller para su mantenimiento y revisión. Esta falta de convoyes hace que merme el servicio, encargado de conectar Vigo con otros municipios como Catoira, Pontecesures o Arcade, entre otros. De hecho, solicitan a su vez el aumento de paradas comerciales en los apeaderos de Redondela-Picota y Arcade, donde varios trenes regionales transcurren por su territorio pero no hace parada.

Todo ello se plantea en la recta final del estudio para la implementación del Cercanías en Galicia, cuyos plazos fijados por el Ministerio de Transportes señalaban finales de 2025 para la finalización del informe.

Diálogo con Comboios para mejorar la ruta Vigo-Oporto

La ruta ferroviaria Vigo-Oporto vivirá en 2026 una transformación, a la espera de que la salida sur sea una realidad. Renfe aseguró que mantiene conversaciones con la empresa Comboios de Portugal para explorar alternativas en el servicio, una vez que la empresa lusa decidió no continuar con el sistema de alquiler de los convoys S-592 a Renfe. Por tanto, se encuentran en conversaciones para, o bien optimizar los S-592 (el actual Tren Celta, con más de 40 años de historia y desgaste) o apalabrar la cesión de otro material que sea compatible con las vías y el servicio. Si eso sucede, se podría decir adiós al actual tren Celta, con su color amarillo característico. Sin embargo, la línea de Comboios va por otra dirección, con la incorporación de trenes de la empresa Stadler en 2026 para sus trayectos entre Lisboa y Oporto y que podrían también ser destinados a la conexión transfronteriza.

El sindicato CGT, en un escrito, mostró su preocupación por el deterioro de la infraestructura ferroviaria entre Vigo y Oporto en los últimos años y que no se le puso remedio. Señalan que los S-592, ya antiguos, cuentan con un confort por debajo de lo que se requiere para una conexión internacional, no existen accesos para personas con movilidad reducida y que es habitual encontrarse asientos destrozados y WC averiados. El servicio se agravó el pasado 17 de agosto, cuando Comboios decidió que el tren no completase el recorrido entero (por exceder su vida útil) hasta Oporto y se realizase un transbordo en Viana do Castelo para los viajeros del tren Celta. Ese inconveniente para los pasajeros se subsanará el próximo 14 de diciembre con la vuelta a la conexión directa.