El profesor que mató a su ex en Baiona rechaza pactar 26 años de cárcel

Los intentos por evitar la celebración de un juicio con un alto riesgo de revictimización para los huérfanos y testigos del brutal crimen de su madre en Baiona en 2023 se esfumaron ayer después de que el acusado, padre de los niños y exmarido de la víctima, rechazara un pacto por conformidad.

Durante la vista preliminar que tuvo lugar en la sección quinta de la Audiencia, el profesor Ángel Rodríguez, que había reaparecido la semana pasada después de más de dos años en prisión provisional, se dirigió al tribunal para renunciar a su abogado. Culpó a su defensa de “desinformación” al asegurar que desconocía las penas a las que se enfrenta y afirmó además que el abogado “no hizo nada”.

Sin embargo, su letrado, pese a los esfuerzos, ha tenido poca opción de maniobra en este tiempo, ante las reiteradas negativas de su cliente a recibirle en prisión. Tampoco lo tuvo fácil inicialmente, pues Ángel tardó tiempo en hablar fingiendo un estado catatónico tal y como concluyeron los forenses en su momento. Finalmente, declaró para reconocer que mató a su exmujer. Lo hizo a las puertas de la vivienda de su casa en Baiona, donde acudió para entregar a sus dos hijos pequeños, de entonces 7 y 9 años. Beatriz, la madre, fue apuñalada y golpeada hasta la muerte allí mismo, en presencia de los menores. Después, el autor huyó, dejó a los niños con su padre y se marchó. Estuvo un día en búsqueda hasta que se presentó en la Comisaría en Ourense, donde fue detenido.

La reacción del acusado arremetiendo ayer contra su defensa se produjo después de que tanto la acusación particular, que representa a la familia de Beatriz, como la popular que ejerce la Xunta y la Fiscalía descartaran los 24 años de cárcel por los que él estaba dispuesto a conformarse. La opción era del máximo de 35 años a los que se enfrenta a 26, pero el procesado se negó a aceptar dicho acuerdo, con lo que tal y como afirmó el presidente de la sala “nos vemos en el juicio”, que será el próximo mes de noviembre.

La vista preliminar tuvo que suspenderse hace unos días para examinar las distintas pruebas presentadas. Ayer, Ángel volvía a los juzgados, con un aspecto desaliñado, pelo largo y sudadera.

A partir de ahora, la máquina para elegir los nueve miembros del jurado popular se pone en marcha. Su hasta ahora defensa solicitaba 15 años de cárcel, al calificar los hechos como homicidio, en lugar de asesinato y dos de lesiones graves por las secuelas a los hijos que mantienen en su escrito las acusaciones. La particular llega hasta los 35 años, mientras que el fiscal pide 33.

La Audiencia decidirá sobre el cambio de abogado

La sección quinta de la Audiencia en Vigo tendrá ahora que decidir sobre si acepta el cambio de abogado tal y como solicitó el acusado. Revisará la argumentación para dicho cambio y las posibles alegaciones de su actual defensa, aunque todo apunta a que tendrá un nuevo letrado. Dicho cambio, no obstante, no afectará en principio el calendario previsto, ya que la vista está señalada para finales de noviembre y la resolución podría zanjarse en una semana. Todavía hay más de dos meses por delante para designar a un nuevo abogado, que se desconoce si será de oficio o particular.

Las pruebas recabadas por la Guardia Civil, el propio testimonio del acusado y de los menores ratifican la autoría del crimen por lo que quedaría por pelear la calificación del mismo, si fue un homicidio como planteaba hasta ahora la defensa o un asesinato tal y como sostienen todas las acusaciones personadas en la causa.

La conformidad, solo antes de conformarse el jurado

La ley del Jurado establece la posibilidad de llegar a acuerdos de conformidad cuando la pena impuesta sea inferior a seis años. Sin embargo, según fuentes consultadas, esa restricción se limita a los casos en los que ya se haya constituido el tribunal popular, y que llevaría a la disolución del mismo. De esta forma, la distinta jurisprudencia señala que es posible alcanzar un pacto en delitos con penas más graves, como homicidio y asesinato, si todas las partes están conformes, siempre y cuando no se haya conformado el jurado.

El acusado de este crimen machista podía haberse conformado ayer con 26 años de cárcel, solo dos más de los que él estaba dispuesto a aceptar, al tratarse de una vista preliminar anterior a la elección de los nueve miembros del tribunal popular.

Será el segundo juicio con jurado tras el verano. Antes, se juzgará al acusado de matar de un tiro a otro en Coia.