La primera ola fue la más grave, con 206 ingresos y 37 en UCI

La pandemia fue evolucionando a medida que se sucedían las mutaciones del virus y sobre todo a partir de la vacunación masiva de la población, que supera ya el 95% de media en Galicia. El impacto en los hospitales fue más grave durante la primera ola, cuando apenas se conocía la forma de transmisión del virus y con una capacidad diagnóstica que al principio era muy limitada. En el área sanitaria viguesa el pico de hospitalizados se produjo el 2 de abril de 2020, con un total de 206 pacientes graves, y cuatro días después se alcanzaba el mayor volumen de pacientes a un tiempo en la UCI, con 37 infectados. Sin embargo, fue la segunda ola con menos infectados al menos oficialmente, con un pico de 1.026 enfermos activos el 9 de abril.

Por otro lado, los hospitales volvieron a sufrir una fuerte presión durante la tercera ola, de nuevo con un pico máximo de 201 enfermos ingresados a la vez el 27 de enero de 2021 y hasta 30 pacientes en UCI en la primera semana de febrero del año pasado.

La vacunación masiva provocó una caída drástica de los ingresos, con hasta dos y tres veces menos hospitalizados en las siguientes oleadas de la pandemia. La variante delta, que apareció en verano del año pasado, elevó la cifra de contagios hasta rozar los 5.000 casos activos el día 2 de agosto. Parecía un récord insuperable. Pero a finales de diciembre irrumpió la última mutación del virus, la ómicron, hoy dominante, y multiplicó por cinco los contagios hasta alcanzar un pico de cerca de 21.000 casos activos el 21 de enero.