Primer día de huelga de jueces y fiscales con tibio seguimiento en Vigo

La primera de las tres jornadas de huelga convocada por las asociaciones mayoritarias de jueces y fiscales en contra de las reformas legales del Ministerio de Justicia tuvo en Vigo un tibio seguimiento. El comité de huelga se centralizó en Madrid por lo que fue imposible conseguir datos precisos sobre el número de magistrados y miembros del Ministerio Público por partidos judiciales ni tampoco a nivel provincial que secundaron el paro, si bien, desde una de las asociaciones convocantes apuntaron a que serían cerca de una quincena los miembros de la judicatura. Tampoco se proporciona información oficial, ya que el Consejo General del Poder Judicial y la Fiscalía General no reconocen el derecho a la huelga, unos paros que no llevan aparejados descuentos en nómina, según la jurisprudencia, ni tampoco sanciones disciplinarias.

Según pudo comprobar este diario, la Cidade da Xustiza funcionó con bastante normalidad, aunque con poco movimiento también debido al inicio del mes de julio. Tanto los juzgados de lo Penal, como la mayoría de Social celebraron vistas, mientras que en Instrucción se suspendieron algunas diligencias previstas, al igual que en Primera Instancia, jurisdicciones con más seguimiento. No obstante, hubo jueces que estando en huelga acudieron a los juzgados y otros que aprovecharon para hacerla cuando no tenían señaladas vistas. Procuradores sí explicaron que les habían notificado aplazamientos, mientras que entre los abogados, la mayoría pudo trabajar con normalidad.

Pese a no ser reconocido este derecho por el CGPJ, el comité de huelga impuso unos servicios mínimos para garantizar “causas urgentes con presos, personas vulnerables, menores, internamientos..”, explicaron desde una asociación, incidiendo en el “ejercicio de responsabilidad” en esta protesta que, a nivel nacional, los convocantes calificaron de “éxito rotundo” al cifrar en más de un 75% el seguimiento de la misma. Jueces y fiscales ya se convocaron a las puertas de la Cidade da Xustiza hace semanas y advertían de lo que podía pasar si el ministro Bolaños no daba marcha atrás en su intento de modificar el acceso a las carreras profesionales y la modificación del estuto fiscal. Sin embargo, ayer, no hubo ninguna movilización ni nada que indicara abiertamente la huelga excepto para quien le afectó directamente así como unos cuantos carteles.