Unas pegatinas ponen fin a la “crisis de las caravanas” en Nigrán

La pugna entre la Policía Local y el Concello de Nigrán va llegando a su fin. La regulación de los espacios destinados al aparcamiento de autocaravanas en primera línea del litoral finalmente ha quedado en nada y todo apunta a que el gobierno local no modificará la Ordenanza de Convivencia Ciudadana, única manera de ahorrarse la redacción de una ley partiendo de cero. La solución adoptada para poner fin a la “crisis de las señales” es un mero adhesivo que sustituye los términos restrictivos “reservado” o “limitado” por otro de carácter informativo, “recomendado”, lo que convierte a las señales de tráfico en simples paneles informativos sin ningún tipo de afán regulatorio.

El jefe de la Policía Local, Jose Manuel Vázquez, explicó a este diario que tras recibir ayer una providencia de alcaldía que lo instaba a destapar las señales envió a los efectivos a examinarlas haciéndolo sólo en las que se ajustan a los requisitos. “Procedimos a enviar un escrito al edil de Seguridad informando de que quedan algunas que no se distinguen de señales de tráfico y que en cuanto se subsanen los defectos quedarán al descubierto”, explica Vázquez. Precisamente, el cambio de sentido pretendido no se produjo de la misma manera en toda la señalética, aparentemente por el uso de sinónimos que en la práctica vienen a decir lo mismo, como por ejemplo “delimitado”, pero no de una manera tan expresa con lo que a día de ayer muchas de ellas no fueron destapadas por los agentes.

Del mismo modo ocurrió con las que todavía se puede leer parcialmente “bando 2020”. Todo esto después de que el alcalde Juan González publicase el tercer edicto con fecha del 8 de abril anulando al polémico del 30 de marzo que aspiraba a ser catalogado de ordenanza, y todo con más de un mes de margen para colocar todas las pegatinas.