Patronales del metal rechazan negociar el convenio provincial si hay huelga

El conflicto del metal en la provincia de Pontevedra apunta a enrederarse más todavía con una brecha cada vez mayor entre las partes. Las patronales instan a los sindicatos a desconvocar la huelga para poder retomar la negociación del convenio colectivo. CC OO, CIG y UGT mantienen los paros para hoy y para el 6 y 7 de julio y piden a las patronales que convoquen la mesa.

La parte empresarial -formada por las asociaciones Asime, ATRA e Instalectra- hace un llamamiento al diálogo y asegura estar dispuesta a continuar en la mesa negociadora “pero sin coacciones ni amenazas que no hacen posible un diálogo efectivo”. Reclaman “acabar con la violencia y agresiones” en referencia a los graves incidentes ocurridos la semana pasada en Vigo en el marco de la feria Mindtech en Ifevi. “Los responsables últimos de los hechos sucedidos son los sindicatos convocantes que debían haber adoptado las medidas necesarias para el adecuado desarrollo de la manifestación sin daños a terceros”, apuntan las tres asociaciones en un comunicado conjunto en el que avanzan que estudian llevar a cabo acciones judiciales por los daños económicos ocasionados a la feria Mindtech, a expositores y visitantes, “incluso con responsabilidades personales e individuales de carácter penal y civil”.

La Confederación Empresarial de Pontevedra (CEP) también responsabiliza a los sindicatos de los daños materiales y personales durante la manifestación del pasado jueves y muestra su rechazo “al perjuicio que se hace a Vigo y al empresariado de la provincia y de Galicia cuando la violencia sindical acapara titulares en lugar de hacerlo las inversiones o el volumen de negocio captado con esfuerzo por el tejido productivo”. “Tiran piedras contra su propio tejado porque si no se logran contratos será difícil mantener el empleo”, indica la patronal provincial que advierte que “de continuar las actitudes violentas o escraches contra los integrantes en la mesa negociadora, se adoptarán medidas contundentes que pueden desembocar en la paralización total de la negociación colectiva”.

Con todo, la CEP hace un llamamiento a los representantes sociales para que controlen a los asistentes a las manifestaciones, sean o no afiliados, y les acusa de “responsables directos si sus convocatorias se tornan violentas”.

Por su parte la Confederación Española de la Policía insta al Gobierno a confeccionar una legislación “que proteja a los agentes policiales” y el sindicato solicita una “imputación por homicidio a los violentos del metal” en referencia a los antidisturbios que resultaron heridos leves la semana pasada en Vigo por el lanzamiento de bombas de palenque.