La musealización de O Castro, en los Premios de Arquitectura
El Colegio Oficial de Arquitectos de Galicia seleccionó cinco obras en la comarca de Vigo entre las 47 finalistas de sus galardones
La musealización de las galerías y la puesta en valor de la fortaleza de O Castro, en la categoría de rehabilitación patrimonial; el edificio de 17 residencias en Pi y Margall, 18, en la sección vivienda plurifamiliar; la casa en Volta do Groño (Valadares), en la vivienda unifamiliar; el albergue de peregrinos de Baiona, en obras de diseño y la instalación del ascensor en Gondomar, en la categoría de obras efímeras y diseños de pequeña escala son las cinco construcciones seleccionadas entre las 47 finalistas a la XXI edición de premios del Colexio Oficial de Arquitectura de Galicia (COAG). Las ganadoras se fallarán en una gala el 5 de abril en el Palacio de Congresos de Galicia, en Santiago de Compostela.
La candidatura a la que aspiraron 243 propuestas visadas, ejecutadas y finalizadas entre el 1 de octubre y el 30 de septiembre de 2024. La obra hecha en la fortaleza de O Castro, por Perfecto Cendón Domínguez, Francisco Javier Vázquez Fernández (Cendón Vázquez Arquitectos) se valoró la intervención e integración en las galerías excavadas en la roca, descubiertas durante la actuación de consolidación y accesibilidad de la fortaleza.
Alberto Quintáns Arrondo y Cristina Margarita Ansede Viz firman el proyecto de las viviendas de Pi y Margall, de las que se destaca el desafío de coordinar entre sí tres programas diferentes de vivienda en altura, junto con el diseño a medida de viviendas, y a su vez con una fachada unitaria que presenta un ritmo de huecos uniforme e independiente de lo que ocurre detrás. La tercera obra en Vigo, la casa unifamiliar de Prieto Patiño Arquitectura, se concibe a partir de las características técnicas y dimensiones de la fabricación de paneles contralaminados de madera de pino de Galicia, definiendo la secuencia de usos de oeste a este.
El albergue de Baiona, de Estefanía Grandal, se caracteriza por dar solución a una geometría compleja y el ascensor de Gondomar, obra de Vicente Pintos y José Antonio Franco, adecuó la accesibilidad al espacio.
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