Lluvias torrenciales, fuertes vientos e inundaciones en Vigo

El primer temporal de viento y lluvia del año concentró en apenas dos o tres horas todas las incidencias provocadas por su paso, que dejó, como ya es usual en Vigo, inundaciones en las calles Julián Estévez y Olímpicos (entorno de Balaídos). A raíz de la alerta naranja por vientos costeros y la alerta amarilla por altos niveles de precipitación, el Concello cerró como precaución los parques y zonas verdes de Samil, A Riouxa y Castrelos. Además, el transporte de ría estuvo inoperativo ya desde la tarde del martes.

El caos de lluvia y viento coincidió con la ‘vuelta al cole’ tras dos semanas de vacaciones navideñas, agravando los atascos ya típicos de estos días en las zonas más céntricas y con alta concentración de centros escolares. Solamente entre las 6 y las 9 de la mañana se concentró la práctica totalidad de los 31,7 litros por metro cuadrado que recogieron los pluviómetros de Meteogalicia. Suficiente para que zonas fácilmente inundables como Julián Estévez o el entorno de Balaídos presentaran diversas incidencias por acumulación de agua, para lo que tuieron que actuar Policía y Bomberos drenando las alcantarillas.

De acuerdo con los datos presentados por el 112 Galicia, Vigo fue la segunda ciudad más afectada por el temporal con más de una veintena de incidentes provocados, sobre todo, por la lluvia. Destacó el de un hombre que, al filo de las 9 horas, se quedó atrapado en el portal de su edificio al no poder abrirlo debido a la fuerza del agua.

Durante uno de los momentos más cruciales de la hora punta, el centro de la ciudad –García Barbón, Rosalía de Castro e Isaac Peral– se quedó sin electricidad, incluso en la red semafórica, acentuando el caos de tráfico. 

El alcalde, Abel Caballero, hizo balance de las incidencias del temporal y señaló que “hubo inundaciones, alcantarillas desbordadas y algunos contenedores desplazados, pero ninguna de ellas revistió gravedad”.

A última hora de la tarde, las lluvias torrenciales regresaron y volvieron a provocar inundaciones en zonas como Areal o Sanjurjo Badía, donde se tuvieron que desviar varios autobuses urbanos debido a la impracticabilidad del terreno. Tras esto, el pluviómetro de Meteogalicia en el Puerto anunciaba que se habían recogido 60 litros/metro cuadrado en todo el día.