Los Reyes Magos hicieron su magia en Vigo

La Cabalgata de Melchor, Gaspar y Baltasar burló a la lluvia y recuperó el trayecto por Camelias, seguido de un séquito mágico, envuelto en una atmósfera navideña

Publicado: 05 ene 2024 - 22:47 Actualizado: 06 ene 2024 - 11:48

Gaspar (Jaime García de Haz) saludó a los niños que le esperaron al final del recorrido en una Cabalgata con una gran asistencia.
Gaspar (Jaime García de Haz) saludó a los niños que le esperaron al final del recorrido en una Cabalgata con una gran asistencia.

Los Reyes Magos ya están en la ciudad. Ayer regresó hasta la Avenida Camelias con un séquito de fantasía en una atmósfera marina. Salvo en momentos puntuales, la lluvia respetó el paso de la Cabalgata que pudo llegar hasta la Praza do Bicentenario. Así, el principal uso que se les dio a los paraguas fue el de colectores de caramelos, que este año sí fueron abundantes y en ocasiones parecían auténticas balas de asalto.

Entre la comitiva más corta de lo habitual, lo más llamativo fueron los grupos de animación, recreando animales fantásticos y a una fauna marina mágica. Desfilaron desde una hidra gigante de dos cabezas a toda una familia de pulpos de distintos tamaños realizados con globos al ritmo de un repertorio musical variado, donde sobresalía la voz de George Michael.

Una banda de piratas con una iconografía divertida y flaqueados por su bandera, unos feroces tiburones o un grupo de bailarinas daban el toque más movido de una comitiva que derrochó en imaginación. Peces luminosos gigantes, medusas de distintas texturas o peceras con fondos marinos.

Los triciclos y tándem de Discamino abrieron la marcha, tras las que aparecieron las tres carrozas de iniciativa privada. Del séquito oficial, la primera en pasar fue la plataforma de la Cartera Real, surgida en medio de las olas. Sonriente y sin dejar de lanzar chuches al público que abarrotaba ambos lados del vial, la emisaria se daba cierto parecido con Susana Pérez, la presidenta de la Asociación de Empresarios de Galicia.

El rey Melchor, en un trono decorado por pececitos tipo Nemo, podía tener lazos familiares con Antonio Villar, presidente de la Asociación de Vecinos de Beade. Detrás apareció Gaspar, quien recordaba al periodista Jaime García de Haz, en una carroza entre caballitos de mar, . Finalmente, Baltasar, sentado entre delfines, imitaba en el aspecto al jugador del Club Deportivo Coya, Bala Seidú.

Una ostra gigante, habitada por una sirena, cerró la comitiva, que en menos de una hora y media llegaba al final del trayecto.

Miles de espectadores acudieron a la cita con los Reyes Magos, que estuvieron acompañados en todo el itinerario por el alcalde. Abel Caballero realizó a pie el recorrido, saludando a los asistentes.

Al llegar frente al Concello, sus Majestades de Oriente, junto a la delegación municipal, hicieron el último tramo en furgoneta hasta Porta do Sol. Allí dirigieron unas palabras a los más pequeños y recogieron de manos del regidor las llaves de las ciudad para entrar en todos los hogares.

Melchor, Gaspar y Baltasar tuvieron una jornada muy atareada. Por la mañana, visitaron a los ingresados en hospitales y residencias de mayores. En el Álvaro Cunqueiro pasaron a saludar a los más niños de la sección pedriática.

Con el poder mágico de la obicuidad, al mismo tiempo que participaban en la Cabalgata, acudieron al kebak de López Mora para hacer personalmente el reparto de regalos a los más de 500 menores inscritos en la asociación Ayúdanos para Ayudar. En una fiesta con pintacaras, los protagonistas fueron los niños de familias de víctimas de maltrato y de inmigrantes sin papeles.

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