Corina Porro presidirá la gestora del PP de Vigo y elegirá a los concejales

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Feijóo encomienda a la excaldesa y presidenta del CES el inicio del rescate del partido tras el fracaso electoral y la dimisión de Elena Muñoz. Porro asegura que aún está "valorando la propuesta" de la dirección. La gestora decidirá los cuatro concejales entre los 27 de la lista, que aceptaron dimitir, y llevará las riendas hasta un congreso

JOSE TEO andres. vigo

Publicado: 04 jun 2019 - 01:36 Actualizado: 04 jun 2019 - 13:22

La foto se tomó el viernes 24 de mayo, con Alberto Núñez Feijóo entre Elena Muñoz y Corina Porro, en lo que pasados los días parece el anuncio de un relevo al frente del PP vigués. Muñoz dimitió este sábado de todos sus cargos y Porro asumiría la dirección local del Partido Popular y en la práctica también del grupo municipal.
La foto se tomó el viernes 24 de mayo, con Alberto Núñez Feijóo entre Elena Muñoz y Corina Porro, en lo que pasados los días parece el anuncio de un relevo al frente del PP vigués. Muñoz dimitió este sábado de todos sus cargos y Porro asumiría la dirección local del Partido Popular y en la práctica también del grupo municipal.

El cartero vuelve a llamar a Corina Porro, instalada desde hace años en la presidencia del Consello Económico Social de Galicia, elegida para presidir la gestora que se encargará de dirigir el PP vigués al menos hasta que se celebre un congreso y nombre nuevo presidente, lo que no será hasta después del verano como muy pronto. La dirección gallega considera que es la persona idónea para comandar el peor momento de los populares en la ciudad por ser muy conocida y contar con enorme tirón entre los militantes y los vigueses.

Porro, alcaldesa de Vigo entre 2003 y 2007 y candidata en tres ocasiones (2003, 2007 y 2011, siempre como primera fuerza, con 13 concejales en las dos últimas ocasiones) reúne todas las características para sacar al PP vigués de su mayor crisis en 40 años tras la marcha de Elena Muñoz luego de un resultado en las elecciones muy lejos del mínimamente exigible, como ella mismo dijo en la noche electoral y en su despedida de todos los cargos, tanto el orgánico como el institucional en el Concello vigués. La operación recambio se activó de inmediato desde la ejecutiva gallega (directamente desde la presidencia de Alberto Núñez Feijóo) y tras barajar varias opciones se optó por pedir a la exalcaldesa que regresara a la primera línea política.

Porro fue presidenta local del PP desde 2003 hasta 2011, cuando decidió abandonar y marcharse a Santiago, no sin cierto resquemor. Como ella mismo apuntó en varias ocasiones, entonces hubo varias voces en el partido en Vigo que pidieron que dejara el puesto pese a haberse quedado a un millar de votos de la mayoría absoluta y haber dejado el PP como primera fuerza de la ciudad. Cedió el mando a Chema Figueroa, que a su vez se lo pasaría años más tarde a Elena Muñoz, tras un congreso local frente a Javier Guerra.

En 2007 el Partido Popular obtuvo 13 concejales con Corina Porro -que era alcaldesa y había logrado 10 ediles en 2003- y el PSOE 9, logrando la alcaldía Abel Caballero, que venía del Puerto como presidente, gracias al pacto con el BNG, que sumaba 5 más, los 14 de la mayoría.

Cuatro años más tarde era Porro la que llegaba ante las urnas tras presidir la Autoridad Portuaria, y de nuevo se quedó con 13, mientras Caballero subía a 11 y el BNG bajaba a 3. Pese a ello, los nacionalistas le dieron la alcaldía de nuevo al PSOE, y se quedaron fuera del gobierno local.

Porro abandonó la Corporación y Figueroa se quedó como portavoz de la oposición durante los cuatro años, en los que firmó un inédito pacto presupuestario con Caballero que resultó letal para las posibilidades del PP.

SIMULTANEAR

La decisión sobre la presidencia de la gestora está en manos de Corina Porro, que desde ayer se lo piensa. El principal obstáculo es que aunque en teoría resulta compatible la presidencia del CES con la dirección política del PP vigués, en la práctica no sería recomendable.

Ayer por la mañana, Porro realizó una seria de consultas con los sindicatos que tienen presencia en el CES -un órgano consultivo que aparece en el Estatuto de Autonomía conformado por agentes sociales y económicos- y estos en principio no pusieron obstáculos a que pudiera simultanear la presidencia del consejo con la dirección del PP vigués.

No obstante, se trata de una opción que no gusta y en todo caos sería provisional, siempre que la exalcaldesa acepte ponerse de nuevo al frente de la junta local de los populares, como parece que finalmente ocurrirá. n

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