Galicia, pionera en poder multar por no vacunarse

El Hospital Álvaro Cunqueiro vacunó ayer a los primeros 500 profesores de Primaria, Secundaria y enseñanzas especiales como conservatorios y escuela de idiomas del área sanitaria viguesa.

La inmunización frente al covid llegará a 6.373 docentes de los 26 municipios del territorio, que se irán citando por orden alfabético. Ayer por error comenzaron las citaciones por la letra A, pero desde hoy se parte de los apellidos que empiecen por H para seguir el sorteo de la Xunta.

El proceso terminará a finales de marzo y a continuación será el turno de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. Hay también otra novedad y es que por ahora solo se está citando a los profesores de menos de 55 años, porque son los que pueden recibir la vacuna de AstraZeneca, de la que hay unidades suficientes. La segunda dosis la recibirán en 10 o 12 semanas.

Los docentes de mayor edad deberán esperar a que Galicia reciba más dosis de Pfizer, la vacuna que se está utilizando desde este lunes con las personas mayores de 80 años, que están acudiendo en masa a la cita. En el área sanitaria viguesa se presentó el 99,2% de los llamados en su centro de salud.

En cuanto al sector educativo, el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, explicó que “la alternativa era no vacunar a ningún profesor”, pero optaron por adelantarse y a medida que aumente el suministro de las dosis de Pfizer o Mderna se irán incluyendo a los mayores de 55 años. Anunció también que comenzarán a citar esta semana a los profesores universitarios de menos de 55 años.

Los sindicatos educativos se reunieron ayer telemáticamente con la directora xeral de Saúde Pública, Carmen Durán, a quien trasladaron su malestar por la falta de noticias sobre la vacunación del profesorado y por la “desorganización”. Las consellerías de Educación y de Sanidade se comprometieron a mantener reuniones quincenales sobre la evolución del proceso de vacunación en este sector. Una de las propuestas de los sindicatos es establecer unas prioridades, por ejemplo para que no tengan preferencia los que no dan clase.

En Vigo, la inmunización al profesorado se centralizó en el Servicio de Medicina Preventiva del Cunqueiro y del Meixoeiro mientras que en paralelo se está inyectando a los mayores de 80 en los centros de salud, a los que se desplazan diariamente los equipos especiales de vacunación.

Hasta el momento 170.570 gallegos recibieron la vacuna, de los que 58.000 tienen dos dosis. En Vigo las residencias de mayores ya tienen inmunizados a 5.600 personas con las dos dosis y a 3.500 sanitarios también con el ciclo completo. Mientras, el resto de miembros de estos dos colectivos recibieron la primera dosis y son casos contados los que quedaron pendientes por distintas casuísticas. Ayer por la tarde, los enfermeros acudieron a varias residencias para llevar la vacuna a otras 328 personas.

PILAR REZA Directora de Enfermería

“A nadie que se vacune de la gripe se le ocurre pedir el catálogo para elegir”

Pilar Reza es la Directora de Enfermería del área sanitaria de Vigo y como tal es la persona que coordina el proceso de vacunación.

¿Qué es lo más difícil en el proceso de vacunación de los mayores de 80 años?

Estos dos días logramos un 99,2% de asistencia entre los mayores citados a pesar de las dificultades. A veces es complicado porque hay que explicar la cita, hacen preguntas, dependen del transporte, quieren hablar antes con la familia antes de tomar una decisión. Lleva tiempo. Vamos introduciendo mejoras, por ejemplo ahora vamos a enviar primero un preaviso para que no les coja de sorpresa que les llamemos para concertar una cita. Citamos en función del número de vacunas que nos envían, sobre 950 al día.

¿Qué ocurre con los que no se pueden desplazar?

Lo primero que les preguntamos es si pueden ir al centro de salud. Habrá otra citación para los que necesiten que vayamos a domicilio.

Estos días algún higienista dental se quejó al recibir por error la vacuna de AstraZeneca.

En Inglaterra fue la que más se utilizó y la inmunización fue elevadísima. Llegará un día en que todos nos vacunemos con AstraZeneca y no pasará nada. Las vacunas frente al covid son especiales por la enorme difusión que tuvieron en los medios. A nadie que vaya a vacunarse de hepatitis o de la gripe se le ocurre pedir el catálogo para elegir.

¿Qué volumen de renuncias tienen en general?

Un 2% más o menos, pero se está reconduciendo. Los que decían al principio que no se la ponían porque tenían fiebre o una gastroenteritis ahora están llamando para decir que están bien y que se la quieren poner. Eso es bueno.

¿Se coló alguien que no debía vacunarse?

Trabajamos con los listados que nos manda Salud Pública, si se cuela alguien por error nos lo debería decir el interesado. Las citaciones fueron rigurosas. Cuando sobran dosis llamamos a los que tenemos en reserva y las que quedan las devolvemos a Santiago para ser transparentes.

¿Son suficientes diez equipos de vacunación?

Tenemos diez equipos que van a los centros de salud, son suficientes para el volumen de vacunas que nos envían, unas 4.800 esta semana para los mayores de 80. Si llegan más los aumentaremos. En el hospital son enfermeras de Medicina Preventiva las que están vacunando a los colectivos profesionales, como sanitarios, profesores, ayuda en el hogar y otros.

¿Qué destacaría del trabajo de los enfermos?

La pandemia nos hizo ver las cosas de forma diferente. Han desaparecido los individualismos, ahora se valora más el trabajo en equipo. Las enfermeras que tenemos son un lujo por lo que han luchado y por lo que han aportado a estos pacientes en lo asistencial y también por su apoyo emocional. Y los equipos de vacunación están muy implicados.