El Cunqueiro es el único hospital gallego que hace el 100% de los abortos

La sanidad pública de Vigo es la única de toda Galicia que asume prácticamente el cien por cien de las solicitudes de aborto, según datos oficiales del año pasado. Esto no es así en el resto de áreas sanitarias porque muchos profesionales se acogen a la objección de conciencia y por ello el Sergas decidió sacar a concurso un contrato de 1,4 millones de euros para la práctica de abortos desde este año y hasta el 2026 incluido en la Comunidad Autónoma.

Estsa derivaciones se refieren únicamente a las interrupciones de embarazo por debajo de las 14 semanas de gestación que no sean de alto riesgo para la mujer.

En el resto de áreas gallegas, Santiago realiza el 90% de de los abortos, Ourense llega al 88% de las solicitudes, Pontevedra al 77%, Lugo está cerca del 60%, Ferrol se queda en el 50% y A Coruña no llega al 40%.

El Sergas estima que cada año se contratan con clínicas privadas unos 805 abortos. Sin embargo, el reparto es muy desigual. El área sanitaria que más deriva es A Coruña que contará con una cifra de cerca de 600.000 euros de este contrato. Le siguen por volumen presupuestario Ferrol y Lugo, con unos 200.000 euros cada una. Vigo es la que menos dinero recibe, con 14.730 euros. Al área viguesa le atribuyen menos de 9 abortos en centros privados

Por otro lado, las tarifas máximas para estas interrupción voluntarias de embarazo serán de 350 euros para las que son de tipo farmacológico y de 570 euros para las que requieren medios instrumentales.

Galicia es una de las comunidades autónomas en las que más se realiza este tipo de intervenciones dentro del ámbito público, según informó ayer el conselleiro de Sanidade. De hecho, en los embarazos que superan las 14 semanas de gestación, “el cien por cien de las interrupciones” se llevan a cabo en centros públicos. Además, Comesaña dijo que “ni una sola mujer gallega tiene que salir de Galicia para hacer un proceso de este tipo, ni siquiera en los casos de más de 22 semanas que son los denominados casos complejos”.

En Galicia hay dos centros que realizan este tipo de intervenciones ya superadas las 22 semanas, en Vigo y en Ourense. Por lo tanto, solo son los “casos sencillos” en los que el embarazo se encuentra entre la semana 9 y la semana 14, los que se derivan a centros privados aunque, según Comesaña, la “intención” de su departamento es que todos los abortos se puedan ofertar en el ámbito público.

La asociación de Defensa da Sanidade y la CIG criticaron ayer la “privatización” de este servicio y recordaron que en Galicia no existe un Registro de Objetores, por lo que se vulnera la legalidad.