Critican el bloqueo de proyectos eólicos como el del sur de Cíes

La Asociación Empresarial Eólica (AEE) asegura tener una “enorme preocupación” por la situación que se está desencadenando en Galicia con la sucesión de paralizaciones de proyectos eólicos marinos como el que se encontraría ubicado al sur de las Cíes, el “Volanteiro”, que recibió el pasado mes de marzo la autorización del Gobierno. Ante esta situación, instaron a las instituciones a “encontrar una solución urgente al bloqueo estructural actual”.

La patronal -que agrupa a 310 empresas, cubre el 100% de la cadena de valor de la energía eólica y representa a más del 95% del sector en el país- advirtió de que en los últimos meses se está produciendo una paralización en la tramitación de los nuevos parques eólicos debido a la interpretación de los tribunales en Galicia de la aplicación de la Ley 21/2013 de evaluación de impacto ambiental y, en particular, del proceso de participación pública durante la tramitación ambiental de proyectos, lo que, en su opinión, “pone en peligro” el desarrollo de nuevas instalaciones renovables en la región.

Concretamente, en Galicia se autorizó desarrollar la eólica marina en cinco polígonos, cuatro en la costa cantábrica gallega y el otro el ya anunciado, y ahora oficial, ubicado a unos 50 kilómetros de las Cíes, frente a la desembocadura del río Miño, en un área de hasta 95 kilómetros cuadrados unos 34 aerogeneradores eólicos de 15 MW y 260 metros de altura (un edificio de 80 plantas). En la zona noratlántica gallega se proyectan otros cinco posibles espacios en los que se podrán instalar parques eólicos marinos.

La AEE llamó a “solucionar” los problemas estructurales que se están viviendo en Galicia, “que pueden acarrear efectos muy negativos y que están condicionados por estrategias de colectivos anti-eólicos, que se basan en justificaciones sin rigor técnico, pero con un fuerte componente ideológico y político, y con intereses contrarios al desarrollo territorial y a la penetración de energías renovables en la comunidad autónoma”.

El sector eólico no es el único que hizo estas críticas, ya que la Federación Galega da Construción también cargó contra lo que considera una “paralización judicial” de parques eólicos que contaban con informes ambientales a favor en Galicia por el efecto que esto tendrá, según alerta, sobre el empleo.

Apunta a la “pérdida de oportunidades” para el desarrollo industrial de la comunidad y para la creación de empleo y advirtieron de las “repercusiones negativas a nivel económico y social” que tiene “la no ejecución de los proyectos autorizados, ya que se trata de inversiones millonarias”. Critica que “después de haber sido sometidas a una evaluación ambiental durante meses y años, quedan en una situación de incertidumbre e inseguridad jurídica”.

Xunta y Concello ponen condiciones y pesca y ecologistas lo rechazan

La construcción de estos nuevos parques eólicos marinos ha generado posiciones dispares y enfrentadas. La Xunta ya avanzó este año que se opondría al proyecto en Cíes si se produce algún tipo de afectación al sector pesquero y defiende que se preserven los recursos y el medioambiente.

Por su parte, el Concello emitió un informe previo donde sin rechazar el parque eólico, pone serías objeciones. En concreto, sostiene que Vigo no puede asumir el coste social, económico y medioambiental de su red eléctrica mientras Stellantis sigue sin acceso a una similar. No se opone al parque “Volanteiro” pero exige que no limite ni impida la candidatura de Cíes a Patrimonio de la Humanidad, que no afecte a la pesca ni al marisqueo y que no perjudique a la ciudad y sus habitantes. Otro requisito es sobre las nuevas líneas eléctricas que tengan que atravesar el término municipal deberán hacerlo de forma soterrada para minimizar efectos negativos en residentes y paisaje.

El sector pesquero manifestó una de las oposiciones más profundas a estos planes. La Federación Nacional de Cofradías pidió su retirada e incluso la dimisión de la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, al considerar que “se le da un tiro en la línea de flotación a un sector”.

Los proyectos de los nuevos parques eólicos también recibieron un firme rechazo de los grupos ecologistas. Precisamente ante estas reclamaciones de las patronales de acelerar la tramitación de los proyectos, la Asociación Galega de Consumidores e Usuarios (Acouga) emitió un comunicado en el que aseguran que “los tribunales echan abajo unos proyectos energéticos que no cumplen las leyes”. El coordinador de la plataforma de personas afectadas por los parques eólicos de Acouga, Manuel Germade, asegura que “se sienten atacados por el Tribunal Superior de Xustiza porque este entiende los argumentos razonados de asociaciones ambientalistas y cívicas y les dan la razón en las sentencias”. Además, critica que “hablan de cientos de puestos de trabajo que van a construir, pero no aportan datos reales ni objetivos”.