Coste y vuelos directos marcan las vacaciones de los vigueses

Las islas nacionales son el destino favorito de los vigueses para pasar las vacaciones de verano, siguiendo de esta forma la tónica de años anteriores. Canarias y Baleares continúan siendo los viajes estrella para quienes buscan buen clima, playas y comodidad en los desplazamientos.

“Los destinos favoritos son los de siempre. El cliente de Galicia, en general, lo que más pide son las islas: Baleares y Canarias. Mucha costa peninsular y, sobre todo, se vende mucho mejor si el viaje cuenta con vuelos directos”, explica Juan Antonio Rivadulla, presidente de la Asociación Gallega de Agencias de Viajes.

La conectividad aérea es uno de los factores clave a la hora de organizar vacaciones por parte de las agencias de viajes. Los vuelos directos desde Galicia, como el de Santiago a Cabo Verde, ofrecen una alternativa que genera un gran interés entre los futuros turistas. Además, muchos vigueses optan por salir desde Oporto para ampliar la oferta y encontrar mejores precios. “El verano es una época complicada en aeropuertos y en las agencias tendemos a ofrecer a los clientes desplazamientos rápidos y cómodos, como las islas, y eso supone que hagan menos escalas posibles”, apunta Rivadulla.

Este patrón se puede apreciar en varias agencias de viajes de la ciudad, como en Viajes Lecertour. Desde esta empresa, Marcos González, asegura que el destino estrella es, con diferencia, las islas Canarias y explica que las familias viguesas también buscan “playa y todo incluido en la costa española, como Valencia”. González también detalla que las parejas jóvenes se inclinan por escapadas europeas o viajes internacionales más exóticos, como Estambul, Vietnam o Tailandia.

La demanda por las islas también se deja notar en Bivestour Viajes, donde Silvia Cruces destaca que “las islas Canarias es el destino más demandado todos los años, junto a las Baleares, concretamente Mallorca e Ibiza”, porque las islas permitan ampliar la oferta económica. “En las islas las familias pueden encontrar un hotel económico y familiar o uno de gran lujo”, afirma Cruces, quien señala que la inversión en este tipo de vacaciones, más económicas en isla para las familias, ronda los 1.000 euros por cabeza.

En LiberTravel, Elisa Ramos confirma que las islas como el viaje más solicitado, ampliándose incluso a los archipiélagos de Madeira y Azores. “Cuando viene una familia suelen pedir destinos en islas, como Madeira, Azores, Canarias (concretamente Tenerife y Fuerteventura), Baleares e incluso Cabo Verde, por el vuelo directo desde Santiago”, avala. Sin embargo, la costa peninsular también es una de las favoritas, ya que “los destinos como Alicante, Valencia o Lloret del Mar, han tenido mucha demanda por parte de los usuarios este año”.

Asia se convierte en la nueva “tendencia” para los jóvenes

Aunque las islas Canarias y Baleares siguen siendo las favoritas, este verano las agencias detectan un repunte en viajes de larga distancia, especialmente a Asia. Japón, Vietnam, China y Tailandia encabezan la lista, tanto para parejas jóvenes como para lunas de miel.

“Este año Asia está vendiendo muy bien, pese a que los conflictos internacionales a veces obligan a desviar rutas o cancelar vuelos”, comenta Rivadulla. Elisa Ramos añade que “Tailandia y Filipinas tienen más empuje que nunca” y que los cruceros por los fiordos noruegos y el Mediterráneo también mantienen una alta demanda.

En el caso de Bivestour, el regreso del vuelo directo a Egipto reactivó el interés por el Mar Rojo, mientras que destinos como San Petersburgo, Moscú, Irán o Siria han desaparecido por motivos de seguridad aérea al ser zonas con conflictos bélicos.

El abanico de precios

El gasto medio de los vigueses varía mucho según el destino y el perfil del viajero. En general, las familias de cuatro miembros destinan entre 3.000 y 3.500 euros a sus vacaciones de verano, aunque “si quieren un hotel de cuatro estrellas en primera línea de playa y media pensión en agosto, ese presupuesto ya no llega”, advierte Rivadulla.

Las agencias coinciden en que, ante la subida de precios, muchos clientes ajustan el viaje, reduciendo noches o con vuelos menos cómodos. “A veces tenían en mente Estepona y acaban en otro lugar más asequible”, resume Rivadulla. En el caso de las parejas jóvenes sin hijos, el gasto medio ronda los 2.500 euros, mientras que las parejas senior que buscan más confort pueden superar los 3.000 euros.