La caballa, el tesoro de los pescadores de caña de O Berbés

En teoría, la pesca con caña en zonas portuarias como en O Berbés está estrictamente prohibida. Sin embargo, en la práctica, esta normativa no parece aplicarse con total rigurosidad. La Autoridad Portuaria de Vigo permite, en cierta medida, una actividad que, según la legislación estatal, debería estar vedada por motivos de seguridad. "Nosotros venimos desde Ourense de vez en cuando y pescamos por aquí. Pero en verdad no sabemos si se puede o no. Si nos echan nos vamos y listo”, asegura uno de los pescadores, quien acude junto a su nieto.

Estos pescadores se concentran principalmente en áreas donde la actividad portuaria es menor, como la escollera de Bouzas y el martillo del Berbés. "Nos dejan pescar en las zonas de las joyeras y donde los faros", asegura otro aficionado, quien menciona que las capturas varían según la temporada y las condiciones del mar. “Si hay algo es caballa, aquí hay muchísima. Sin embargo, la lubina por ejemplo hay muy poquita, el pulpo tampoco está en veda. Yo ahora por ejemplo estoy al choco, pero hasta dentro de un mes o así no hay”, añade Benito, con quien coinciden el resto de pescadores que habitúan la zona.

“Abunda sobre todo la caballa. Las veces que nos decidimos a venir siempre vamos a ella, es pesca casi segura”, indica José Antonio. Y es que la pesca de este pescado, también conocida como rincha, es especialmente abundante en la zona exterior de O Berbés, donde no hay atraque de barcos. “Es el sitio ideal” , indica Antonio.

Lejos de disminuir, cada vez es más común ver a docenas de pescadores en el Berbés, lanzando sus cañas cerca de frigoríficos, viveros y naves. "Depende sobre todo del tiempo y las condiciones del mar, pero un día normal solemos juntarnos, como mínimo, 30 personas”, asegura Benito, un veterano en la zona. Aunque la normativa estatal prohíbe tanto la pesca deportiva como el baño en áreas portuarias, en Vigo se ha adoptado un enfoque más flexible: se tolera la pesca mientras se mantiene prohibido el baño. "Solemos venir todos los años, no todos los días pero sí de vez en cuando. Hasta la fecha nunca nos dijeron nada, siempre nos han dejado·, indica José Antonio, quien acude al Berbés junto a su hijo.

Según indican estos pescadores aficionados, la Policía Portuaria ha optado por dejar pescar en ciertas zonas del Berbés, evitando así enfrentamientos y males mayores. Esta permisividad es bien recibida por todos los pescadores, quienes aseguran que la práctica es segura siempre que se respeten ciertas normas no escritas.

"Aquí en el interior está prohibido, pero depende con quién des te pueden dejar pescar algo. Depende del guardia al final. Donde hay más libertad es en la escollera exterior de aquí del Berbés, también es más segura", explica Antonio, con quien coincide Benito. "Aquí en el interior está prohibido, pero es más que nada por seguridad, ya que es verdad que andan muchas carretillas".

Con el tiempo, esta actividad sigue reuniendo a docenas de pescadores aficionados a diario, como Benito y Antonio, quienes tienen la pesca de caña como parte de su rutina. “Yo vengo aquí todos los días, y como yo mucha gente, sobre todo ahora con la llegada del buen tiempo”, indica Benito, y es que como él está Antonio. "Me paso aquí gran parte de mi tiempo. Y es que yo vengo todos los días. Suelo llegar bastante temprano, sobre las ocho de la mañana y estoy aquí hasta las dos aproximadamente. Hay días que se pesca mucho y otros que no tienes tanta suerte", concluye.