Un ámbito junto al Ofimático busca salir de años de abandono

Con el proyecto del futuro Parque Ofimático cada día más definido por parte de la Xunta, los propietarios de uno de los ámbitos colindantes, en Lavadores, entre la calle Ceboleira y Martínez Garrido tratan de poner solución a más de 10.000 metros cuadrados con años de abandono.

Hace cuatro años, la junta gestora de las parcelas retomó la operación de venta tras paralizarse con la crisis financiera. Se llegó a ofertar a inversores chinos, por un precio de 19 millones de euros, sin que hasta la fecha haya fructificado. Son 34 propietarios que tienen 18 viviendas, cuatro en régimen de alquiler, y el resto se divide entre inmuebles en ruinas, fincas y solares.

Tras la aprobación del Plan General, se abre una nueva vía para impulsar el desarrollo de este ámbito, de suelo urbano no consolidado y en el que se mantienen edificaciones levantadas hace décadas.

Ahora, la opción que se plantea es la de acudir al Concello y constituir una junta de compensación para poder llevar a cabo dicho desarrollo, sustituyéndose las edificaciones existentes y creando espacios verdes y dotaciones. En dicho entorno, el Plan General incluye un elemento catalogado como vivienda tradicional, un inmueble en la calle Pateira cuya integración tendrá que garantizarse en la ordenación urbanística y establece las alturas de las edificaciones en cinco plantas.

Aunque algunas viviendas hicieron reformas, el entorno sigue prácticamente igual desde hace años, con inmuebles en mal estado y otros vacíos o en ruinas. En el camiño de Vilaboa hay residentes de toda la vida, que durante estos años han mantenido en pie los inmuebles en una zona prácticamente rural, con propiedades en algunos casos que se remontan más allá de los cien años.

“Esta zona está fatal, hay maleza y basura”

El pedido del supermercado moviliza a Isabel, una de las vecinas con más edad de esta zona, en la que lleva viviendo toda la vida. El trabajador le sube la compra y charla con ella, que asegura estar muy mayor para pensar en asuntos inmobiliarios. Allí, todavía hay casas sin timbre, donde la forma de avisar es golpeando a la puerta. “Porque aquí nos conocemos todos", explicaba un joven que aseguraba vivir en la que fue la casa de sus padres.

Otros vecinos de este entorno entre Ceboleira y Martínez Garrido reconocían que la zona “está fatal”. Alba y Marta criticaban el abandono, sin asfaltado en todos los tramos o agujeros en la vía. Isabel, también residente, destacaba la abundante maleza “que no se limpia” y el hecho de que “haya partes que parecen un basurero porque viene aquí la gente a tirar desperdicios”.

El límite con el futuro Parque Ofimático se topa con un ámbito con varias viviendas en pocos metros cuadrados lo que complica las opciones de conseguir una compensación adecuada por el suelo. De ahí,que desde el inicio los propietarios también estuvieran dispuestos a la permuta. El proyecto planeado por la Xunta podría dar también un impulso a un punto de Lavadores, que lleva años esperando por un cambio.