La IA cambia la manera de apostar en la Lotería de Navidad

La inteligencia artificial (IA) ha entrado de lleno en el sector de los juegos de azar y está cambiando tanto la forma de jugar como la de gestionar las apuestas. Cada vez más administraciones de lotería en España están adoptando estas tecnologías para mejorar su funcionamiento, ofrecer servicios más personalizados y atraer a nuevos públicos.

Según datos de Loterías Rosa de Ponent (Lleida), en poco más de un año (del 1 de octubre de 2024 al 15 de noviembre de 2025), una gran parte de sus clientes ya utiliza herramientas basadas en IA para realizar sus apuestas online: 41,6% de las apuestas del Euromillones se hacen usando sistemas de predicción con IA. 42,8% de las apuestas de La Primitiva también se realizan con IA.

La clave de estas nuevas tendencias es que la IA ofrece información útil a los jugadores: muestra qué números han salido más, cuáles llevan más tiempo sin aparecer o qué combinaciones podrían ajustarse mejor a sus preferencias.

La Sociedad Estatal Loterías y Apuestas del Estado (SELAE) también está recurriendo a la IA para renovar su imagen y acercarse a las nuevas generaciones, con herramientas de generación de contenido (como diseños de boletos, vídeos o imágenes promocionales) capaces de conectar con la cultura actual.

El uso de la IA también está llegando a sorteos emblemáticos como el Sorteo de Navidad, ya que los compradores pueden elegir su número usando diferentes criterios personalizados: desde análisis estadísticos y matemáticos hasta tendencias de compra o incluso numerología.

La IA no solo se usa para mejorar la experiencia del usuario, sino también para protegerlo. En noviembre de 2025, el Ministerio de Consumo, a través de la Dirección General de Ordenación del Juego (DGOJ), anunció el desarrollo de un algoritmo pionero para detectar de forma temprana posibles casos de juego problemático online. Este sistema se enfoca únicamente en actividades de mayor riesgo, como las apuestas deportivas, el póker, el casino o el bingo online. Quedan fuera de este sistema las loterías tradicionales o instantáneas, consideradas de menor riesgo adictivo.