César Portela: “El Museo del Mar y el auditorio fueron de los proyectos más importantes que hice”
"Los materiales tradicionales dan muy buenos resultados y están a mano", apunta el arquitecto
El arquitecto Portela (Pontevedra, 1937) fue Premio Nacional de Urbanismo, Medalla de Oro del Consejo de Europa, Premio Nacional de Arquitectura y Premio Europeo Philippe Rotthier. A sus cerca de 90 años sigue trabajando en su estudio de la ciudad del Lérez y acaba de publicar el libro ‘Mis Casas’, donde reúne 18 viviendas unifamiliares de toda Galicia.
¿Cómo hizo la selección de las viviendas que muestra en el libro?
No es fácil y se quedaron varias fuera, como la casa de Xosé Manuel Beiras y muchas otras. Procuré hacer una selección de tipologías de casas diferentes la mayoría todas nuevas y algunas que fueron rehabilitadas. La selección que se hizo se completa en cómo se hicieron las construcciones. Por lo tanto, se trata de una descripción de la casa durante una conversación con otro arquitecto y después cada vivienda tiene el comentario de los propietarios, porque yo quería introducir esa factor que me parece importantísimo. Empezamos a hacer la recopilación en el 2020. La arquitectura influye en cómo te sientes en tu casa. Cada uno son gente distinta y donde vives influye, por eso es necesario conocer al inquilino. La mayoría de viviendas del libro fueron para amigos míos.
El dibujo de la portada es de su padre, ¿le influyó su familia a la hora de estudiar arquitectura?
Sí, porque cuando estaba estudiando bachillerato acompañaba a mi padre a ver las obras y veía cómo tenía una relación positiva y muy buena. Tenía una buena relación con los trabajadores y me animó mucho a hacerla.
Usted fue Premio Nacional de Urbanismo en 1981, ¿cómo ha cambiado el urbanismo desde esa época?
El urbanismo es una continuación de la arquitectura. Donde sitúas una casa ya estás haciendo urbanismo y de la manera que harías tú una plaza o una calle. Yo lo veo como una solución de continuidad. En Galicia toda la arquitectura tradicional se inserta muy bien en el territorio. Las últimas casas que se hicieron chocan un poco porque no tienen nada que ver con la arquitectura popular. En todas las épocas hay buenos arquitectos, regulares y malos, pero, en general, toda la arquitectura tradicional está hecha con teja, con piedra y con madera, que son materiales que está comprobado que han dado muy buen resultado y los tienes a mano para construir. Prueba de ello, es que a casas que tienen 200 años se les cayeron las cubiertas porque están abandonadas, pero los muros siguen allí presentes.
¿Qué papel juega la rehabilitación en la situación de la vivienda actual?
Es importante siempre. Algunas de las casas que se incluyen en el libro estaban con todos los muros de piedra y me daba miedo no aprovecharlas si era posible. Además, me ahorraba dinero. La rehabilitación debe intentar respetar lo que debe respetarse e introducir elementos y factores que den solución a las necesidades del presente. Cada vivienda necesita un tratamiento diferente pero, por ejemplo, en el caso de Pontevedra, los espacios del Centro Histórico son mucho más agradables, transitables y cómodos que la parte nueva de la ciudad.
Fue pionero en muchas de sus construcciones, ¿en qué se inspira para realizar un proyecto?
Lo primero es conocer un sitio bien, lo segundo es conocer a los propietarios que van a vivir ahí muy bien y, después, también intentar hacer más con menos y no prescindir de todo lo superfluo y ver qué es lo que respetas, qué es lo que introduces nuevo y cómo lo compaginas. Es ese el trabajo del arquitecto. Al final estás haciendo una casa con las necesidades que satisfaces, pero con el mismo empeño y cariño como si fueran para ti. Por eso le llamo ‘Mis Casas’.
¿Lleva la cuenta de todo lo que construyó?
No la llevo, la verdad, porque hice desde auditorios hasta trabajos para amigos que me llamaban o pedían consejo sobre cómo ampliar una habitación.
¿Hubo algún proyecto que rechazó?
Sí, eso es muy importante. Si yo veo que lo que quieren hacer, tanto a nivel particular como de promoción, y no estoy de acuerdo con ello, no lo hago. Creo que a los arquitectos hay que juzgarlos por la obra que hacen, pero también por la que se negaron a hacer y renunciaron porque no estaban de acuerdo con lo que planteaban. Yo a algún promotor le dije esto no lo hago porque es un disparate, le dije te quieres forrar con esta obra, y no me parece mal, pero haciendo una cosa bien hecha.
En Vigo hizo varias obras destacadas. ¿Qué tiene de especial para usted esta ciudad?
Para mí Vigo tiene muchas cosas especiales, entre otras cosas porque cuando era chaval, mis padres tenían muchos amigos que venían los fines de semana y yo conozco Vigo desde pequeño. Recuerdo que íbamos andando a la fiesta de Bouzas, a la taberna Eligio. Mi padre era amigo de Álvaro Cunqueiro, etc. Le tengo mucho cariño y me parece una ciudad con cosas estupendas como el hecho de tener el Monte del Castro a un kilómetro o dos del mar. Eso es impresionante. Es un poquito incómoda para caminar por los desniveles, pero con una situación y vistas fantásticas. Vigo vertical es una buena opción para gente que tiene una cierta edad, el tener esas posibilidades mecánicas me parece que es importante.
¿Cuál fue el proyecto más complejo que hizo para Vigo?
El Museo del Mar de Galicia, el auditorio del Mar de Vigo, me parecen importantes y fueron de los más complejos. También está la Casa de las Palabras en Samil o la terminal de Peinador.
¿Cómo fue el proceso de creación del Museo del Mar de Vigo?
Hacer una cosa en el borde del mar siempre es una aventura y un riesgo. Hay ejemplos que son un disparate, pero hay otros como los faros y ciertas naves que son una manera de hacer arquitectura al lado del mar y que son muy importantes y yo quería aprovechar eso todo. Primero, fue una fábrica de salazón, después de reses, cuando visitamos la obra era un sitio donde guardaban los coches abandonados, pero se conservaban las naves antiguas y pensé en ampliarlo. Hicimos una pasarela que unía con otra familia de naves, donde guardaban allí las reses y construimos esa parte nueva. Prolongamos un poco el embarcadero y lo acabamos en el faro. Desde ahí se veía la puesta de sol maravillosa detrás de las Cíes. De esta forma, simplemente el pasear por el edificio ya era el Museo del Mar porque tienes 20 perspectivas diferentes del mar y de la ría.
Respecto al feísmo. ¿Hay una mayor conciencia actual para evitarlo?
Sí, porque se criticó mucho. No es que sean casas feas, es que son malas. Los arquitectos pensamos que no es solo que sea fea, sino que es mala. Las nuevas viviendas cumplen los estándares y ahora se cuidan más las cosas, aunque siempre hubo arquitectos que hicieron buena arquitectura.
¿En qué proyectos está trabajando actualmente?
Estoy restaurando la capillita que había en la Isla de Sálvora, que va a ser un punto de información para la gente. Recuperé un poco el valor de las casas antiguas para que siguieran siendo un ejemplo de cómo podían ser unas viviendas en una isla. Estoy haciendo un centro de promoción agraria en Santiago para que la gente que viene de fuera vea lo que es Galicia. Y cosas que vamos haciendo por ahí con calma.
¿Hay algo que le quede por hacer?¿qué obra le gustaría para Pontevedra?
Depende mucho. Hay algún concurso que gané y no se hizo, como la estación central de Valencia. Me gustaría valorar la extraordinaria situación de Pontevedra como ciudad. Tiene el campo, por lo que estás viviendo en el rural de Galicia y luego la situación con el río Lérez. Es una pena que con tres ríos no se le haya sacado partido. La zona de A Moureira debería ser un sitio donde la gente se bañara y paseara bajando desde la Alameda a lo largo del mar y coger un barco e ir hasta A Puntada y no ser un aparcamiento de coches.
¿Hasta cuando va a trabajar?
Como me gusta y me divierto haciéndolo, seguiré. Insistí siempre en hacer las cosas que me gustan en la vida. Si la gente viviera haciendo lo que le gusta, el mundo sería otro. Y sigo aprendiendo. Al mismo tiempo que yo enseñaba, aprendía de los canteros, de los albañiles, y enseñaba a los alumnos a ser arquitectos.
Contenido patrocinado
También te puede interesar