Somos el horizonte de nuestra competencia.
Otra vez vuelven a la memoria los consejos de Kenichi Omae en su diagnostico sobre Galicia. En el concierto internacional no sois nadie, decía. Tenéis dos industrias, sobre las que podéis apoyaros para empezar a crecer: Inditex en el norte y Citroen en el sur, de manera que tendríais que volcaros sobre la industria textil en el norte y la automovilística al sur, lo cual supone que para ser competitivos, en el caso del sur, tendríais que crear oferta en industria auxiliar del automóvil y conseguir la ubicación de un par de factorías mas, de otras marcas. Si conseguís, ofreciendo gratuitamente suelo habilitado para ello, la implantación de dos nuevas factorías, pasaríais de 500 empresas auxiliares a 2000, pero necesitáis sobre todo dos cosas: perfeccionar las infraestructuras ajustadas a las necesidades reales (puertos, aeropuertos y ferrocarril) y gestión con las marcas a ubicar, lo cual os lleva a actuar como Galicia, nunca como Vigo y menos en competencia interna.
En Galicia, decía, vuestra primera misión es convertir esa absurda competencia interna en total colaboración, actuando al unísono, pues mientras no consigáis eso, es mejor que no os planteéis absolutamente nada en el campo de la competitividad. No podéis seguir con esa mentalidad pueblerina. Es preciso diseñar un plan de competitividad para toda Galicia, en el que no exista la competencia interna, sino todo lo contrario. Si en el sur vuestras primeras opciones son el sector del automóvil, toda Galicia debe apoyar vuestras actuaciones, al igual que vosotros debéis apoyar al norte en su afán por ser competitivo en el sector textil. Vuestros puertos han de agruparse en una única oferta en el sur, agrupando Vigo, Pontevedra y Villagarcía y otra en el norte con Ferrol y La Coruña especializando cada localización, sin competencias y si con complementariedades. Vuestras infraestructuras ferroviarias de transporte han de conectar directamente con Francia por el norte y con Madrid por el sur. Vuestro aeropuerto de Santiago ha de complementarse con el internacional de Oporto, dejando a Vigo y Coruña con vuelos nacionales y sobre todo especializados en carga, con conexiones rápidas y efectivas entre aeropuertos, al igual que con el de Oporto que también forma parte de la zona.
Tenéis que libraros de aquellos políticos con estrecha visión, de políticos pueblerinos que anteponen sus intereses personales a los de Galicia, de aquellos que quieren enfrentar pueblo con pueblo, e impiden con ello el que Galicia pueda ser una región competitiva en el concierto internacional, esos son el enemigo.
Galicia ha de ser nuestro norte y Oporto nuestro aliado, no la competencia entre ciudades, solo así podemos llegar a ser competitivos en el concierto internacional. Las actitudes contrarias a esa visión no son mas que el reflejo de una actitud sumamente paleta, propia de canallas a quienes anteponen a Galicia sus propios intereses y quieren hacer de nuestros ciudadanos un instrumento de sus ambiciones.
¿Seremos capaces de entenderlo de una vez por todas? Lo dudo.
