Corina Porro, para 2011

Lo dijo bien claro Corina Porro: es una militante disciplinada y cualificada del PP y está a lo que diga la dirección del partido. Y el partido dice que tiene que volver a presentarse a la alcaldía, lo que ocurrirá en mayo de 2011 si no ocurre algo impensable desde aquí hasta entonces. Porro, mientras tanto, quiere tirar balones fuera y dedicarse al Puerto en exclusiva, porque el organismo lo necesita para intentar salir de la crisis en que se encuentra. No lo tiene fácil, y el contencioso que los antiportuarios tratan de volver a colocar a las obras de Areal es la prueba de que no habrá que sacar el champán hasta que la faena esté no ya avanzada sino terminada. El PP también sabe que no puede quemar del todo a su candidata, así que mantendrá una c i e r t a ambigüedad s o b r e l a nominación —se han barajado otras opciones, como Lucía Molares o Chema Figueroa— para ir ganando tiempo y evitar que la candidata se convierta en el enemigo a batir por el PSOE. Me temo que se trata de una operación imposible, porque el alcalde ha trenzado una estrategia sencilla que se basa en la oposición por relevos a la titular del Puerto: un día uno de sus concejales, otro un diputado en el Parlamento de Galicia y otro día una senadora. Es la técnica del martillo-pilón. Así las cosas, todavía pasará un año antes de que el PP haga oficial lo oficioso, aunque el presidente gallego no pudo reprimirse hace unos meses y en pleno mitin confirmó que cuenta con Porro para recuperar la Alcaldía. Creo que a estas alturas Corina Porro, entre la plaza del Rey y la Estrella, se quedaría con la segunda como despacho. Pero ya lo dijo: es una militante disciplinada.