Polonia restringe el tráfico aéreo con Ucrania y Bielorrusia tras incursión de drones rusos

Las autoridades de Polonia anunciaron la imposición de restricciones al tráfico aéreo en todo su flanco oriental, en respuesta al aumento de tensiones tras el derribo de varios drones que ingresaron en su espacio aéreo durante un ataque del Ejército ruso contra Ucrania. La medida, solicitada por el Mando Operativo de las Fuerzas Armadas, establece que entre el amanecer y el anochecer habrá una prohibición total de vuelos civiles, mientras que entre el anochecer y el amanecer se mantendrá una zona de exclusión con excepciones únicamente para operaciones militares y servicios esenciales.

La Agencia de Navegación Aérea de Polonia (PANSA) indicó que la restricción estará vigente desde las 22.00 horas del 10 de septiembre hasta las 23.59 del 9 de diciembre, y que los drones civiles tienen prohibido sobrevolar la zona durante las 24 horas del día. La entidad recalcó que esta medida, que no puede extenderse más de tres meses consecutivos, busca garantizar la seguridad estatal frente a posibles incursiones en el territorio nacional.

El anuncio se produce después de que Polonia derribara varios supuestos drones rusos con apoyo de aviones de aliados de la OTAN, en el primer incidente de este tipo desde el inicio de la invasión rusa a Ucrania en febrero de 2022. Las autoridades polacas han subrayado que no tienen dudas de que la incursión no fue un accidente, lo que llevó al Gobierno a convocar al encargado de negocios de Rusia en Varsovia para entregarle una nota de protesta formal.

Por su parte, Moscú negó haber dirigido ataques contra Polonia y señaló que el alcance máximo de los drones empleados en la ofensiva contra Ucrania no superaba los 700 kilómetros. Sin embargo, las autoridades polacas consideran la medida necesaria para proteger su frontera, en un contexto de creciente tensión en Europa del Este, donde las operaciones militares rusas continúan afectando la estabilidad regional.

La decisión polaca ha generado alerta entre operadores y aerolíneas internacionales, que deberán reprogramar rutas para evitar la zona restringida, y refuerza el compromiso del país con la defensa de su espacio aéreo junto a la OTAN, consolidando una estrategia de prevención ante posibles nuevas incursiones.