Galicia, Euskadi, Asturias y Cantabria se unen en defensa del corredor atlántico

El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ratificó ayer la apuesta de Galicia por las infraestructuras del norte peninsular para sumar competitividad tanto en el transporte de mercancías como del hidrógeno verde. Así lo indicó tras la reunión de la Comisión del Arco Atlántico a la que asistió en Vitoria junto con el presidente de Euskadi, Íñigo Urkullu; el de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, y el de Asturias, Adrián Barbón.

Rueda, que acudió al encuentro acompañado por la conselleira de Infraestruturas e Mobilidade, Ethel Vázquez, abogó por potenciar las comunicaciones entre las Comunidades autónomas del norte para colocarse en la primera línea de salida ante los retos que se presentan a través de los Next Generation y las energías renovables.

Y destacó que los representantes de las cuatro Comunidades Autónomas coincidieron en la necesidad de apostar por el corredor atlántico de mercancías para no quedar aislados de Europa “y porque lo pide la propia UE”, puntualizó. Recordó la cumbre celebrada a finales de enero en Galicia y en la que participaron también Asturias y Castilla y León, que tuvo como consecuencia inmediata la creación del Comisionado que se reclamaba desde hacía años, por lo que el presidente de la Xunta remarcó que este tipo de encuentros permitían no solo intercambiar comunicaciones de interés sino también llevar a cabo “acciones coordinadas” con resultados satisfactorios.

“Todo pasa por estar organizados. Creemos en la cooperación”, subrayó Rueda y añadió que Portugal es un “buen aliado, interesante y potente, para defender la conexión energética y ferroviaria con Europa”.

El desarrollo en plazo del corredor atlántico noroeste ferroviario es una de las preocupaciones compartidas por las cuatro regiones, sobre todo después de que Francia haya retrasado de 2030 a 2042 su proyecto de trazado ferroviario de Burdeos a Dax y no haya puesto fecha a la posterior conexión con Hendaia y por tanto con la frontera española. Por ello se han puesto de acuerdo para pedir a la Comisión Europea y al Gobierno español “todos los esfuerzos” para que Francia cumpla su compromiso inicial, subrayó el lehendakari, Íñigo Urkullu.

España y la UE “no pueden consentir” que Francia ponga un “tapón” al desarrollo ferroviario comunitario, dijo por su parte el presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, que asume la conexión al corredor atlántico “por la meseta” aunque el verdadero objetivo es que la unión sea por Bilbao, algo de “pura lógica”. Rueda insistió en que la conexión ferroviaria “pasa por Francia y por Euskadi” y aboga por trabajar “unidos y con inteligencia”. Mientras que para el presidente de Asturias, Adrián Barbón, “hay que exigir a Francia que resuelva esta cuestión porque es clave y vital”, y señaló que no compiten “con el corredor Mediterráneo”, sino que se trata de actuar “en paralelo”. Barbón pidió a Pedro Sánchez aprovechar la presidencia española de la UE para reivindicar estas propuestas.

Cuatro comunidades en busca de la “macrorregión” del Norte

Los cuatro mandatarios coincidieron en la conveniencia de hacer oficial este tipo de encuentros con la formalización de un foro de presidentes permanente. Rueda indicó que al igual que se pide cogobernanza al Gobierno central, “todo será más fácil si nos ponemos de acuerdo y por encima de intereses partidistas ponemos la defensa de nuestros territorios”, indicó el presidente de la Xunta, recalcando que ese era precisamente el objetivo de los foros interterritoriales.

“La reivindicación de la estrategia de macrorregión es fundamental que se articule con un componente político que deje a las claras el autogobierno autonómico”, subrayó Barbón.

El titular del Gobierno gallego concordó con sus colegas de Euskadi, Cantabria y Asturias en la conveniencia de crear una macrorrexión atlántica que permita unir fuerzas en la defensa de estos intereses comunes y ante los retos que se presentan alrededor de los Next Generation, y consideró de interés la incorporación de Portugal por la apuesta que el país vecino está haciendo por la conexión terrestre.

En el encuentro se abordaron otras cuestiones, con especial atención al reto demográfico. En ese sentido, Rueda defendió las medidas pioneras adoptadas en Galicia, como la ley de impulso demográfico, la gratuidad en las escuelas infantiles o la creación de casas nido. Subrayó que “lo que funciona en un lugar puede funcionar en otros territorios”.