La bajada de caudal en los ríos deja al descubierto los daños del temporal

efectos de las borrascas

Los ourensanos caminan por pistas sin firme en las termas de Outariz, donde el Miño causó cuantiosos desperfectos

A.RODRÍGUEZ

Publicado: 24 dic 2019 - 02:48

Bañistas cruzan por entre los socavones que ocasionó el río Miño en la pista de acceso a las termas públicas de Outariz.
Bañistas cruzan por entre los socavones que ocasionó el río Miño en la pista de acceso a las termas públicas de Outariz.

nnn La bajada de caudal en los ríos de la provincia tras el paso de las borrascas Elsa y Fabien comienza a dejar al descubierto los desperfectos que ocasionó el agua y el viento. El río Miño aún mantenía anegadas ayer las termas públicas de A Chavasqueira y Muíño da Veiga, pero en las de Outariz (están situadas a más altura) quedaron al descubierto pistas y paseos sin firme. Varios viandantes caminaban ayer entre los socavones que abrió el agua en los mismos accesos al complejo termal.

La riada arrancó vallas de madera, letreros, canalizaciones, bancos y paneles informativos. La concejala de Termalismo, Flora Moure, esperaba ayer a que baje aún más el nivel del río (en la tarde de ayer discurría con 6,7 metros de altura) para concretar los daños, que inicialmente ya los calificó de "cuantiosos".

El Concello, según la edil, adecentará los destrozos "pero cuando los técnicos aseguren que no se van a registrar nuevas crecidas del río en los próximos meses". Las obras menores, como reponer vallas o letreros se acometerán con más rapidez, según Flora Moure, a través del taller de empleo que tiene en marcha la institución municipal.

Los graves daños que ocasionó el río Miño en el termalismo de la ciudad no son los únicos. El concejal de Infraestructuras, Miguel Caride, recordó ayer que los dos temporales dejaron "dañado" el alumbrado público de la ciudad. "Solamente en la jornada de hoy -por ayer-registramos 60 incidencias en la iluminación", dijo, puntualizando que las zonas más afectadas son las rúas Marcelo Macías, Otero Pedrayo, Nuno de Ousende, San Rosendo (en esta no es posible conectar el alumbrado navideño), carretera de O Pino, Velle, Cruz Alta, Untes, Palmes, Cotoriño, carretera N-120 y Rairo. En la mayoría de los casos, los desperfectos los ocasionaron árboles que cayeron sobre tendidos eléctricos.

Según Miguel Caride, los técnicos y trabajadores municipales del Servicio Eléctrico estaban trabajando para subsanar las averías lo más pronto posible.

Parques, pabellones e iglesia

Los desperfectos también comienza a ser visibles en el resto de la provincia. El caudal de los ríos Miño y Avia aún mantenían ayer anegado parte de la comarca de O Ribeiro. En la capitalidad, Ribadavia, ya se apreciaban tendidos eléctricos y telefónicos derribados y numerosas carreteras con socavones. El agua destrozó vallas, bancos y paneles informativos.

Una situación similar la presentaba A Limia,donde los daños,según el Concello, se concentran más en los cultivos y en las pistas agrícolas y canales de regadío.

Las consecuencias del temporal aún las sufrían a las 19,00 horas de ayer un millar de vecinos de la provincia al no disponer de suministro eléctrico en sus viviendas. A esa hora, Ourense era la provincia gallega más afectada por los cortes de luz, dado que en Lugo, Pontevedra y A Coruña, según la compañía Naturgy ya solo quedan sin servicio una treintena de abonados.

La hidroeléctrica lamentaba los graves trastornos ocasionados a sus abonados en Ourense al tiempo que recordaba que estaba poniendo todos los medios para "restablecer el servicio a la mayor brevedad posible". En Cenlle reclamaban la instalación de generadores.

La bajada del caudal del Sil deja al descubierto daños en las infraestructuras públicas de O Barco y Vilamartín. En el primero de los municipios, el agua provocó un desprendimiento en el falso techo de la iglesia de Santa Rita.

Obras en colegio de Verín

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, recordaba ayer que los técnicos están evaluando los daños en cultivos agrícolas, bienes y servicios, además de las carreteras, colegios y centros de salud. El presidente del Ejecutivo gallego, tras lamentar los daños humanos y materiales que deja el temporal en Galicia, aseguraba que se están recopilando datos en "tiempo real" con el objetivo de acometer obras y tomar iniciativas que palien la situación. En algunos de los casos, como el del colegio Castro de Baronceli de Verín (quedó sin tejado), la Consellería ya adjudicó los trabajos de mejora a la empresa Vipeca por importe de 252.471 euros.

Los trabajos ya comenzaron ayer con la retirada de los escombros y los restos de la cubierta y está previsto que finalicen el próximo mes de enero. Las clase no se verán interrumpidas, dado que las aulas ya fueron habilitadas en la planta baja para evitar molestias a los escolares.

Carreteras

El agua también ocasionó desperfectos en pistas y carreteras de Monterrei, Oímbra, Verín y Riós. En este último municipio, cayó el muro de la piscina municipal y se hundió parte del firme de la carretera de Veiga do Seixo.

Los técnicos de la Diputación también avalúan los desperfectos ocasionados al hundirse el firme en las carreteras Vilariño de Conso-Mazaneda, Muíños-Lobios y Esdrosa-N-525 (A Gudiña). También cedio un puente de una carretera local en O Bolo. En Carballeda de Avia, el vendaval dejó sin cubierta al polideportivo y causó daños en el centro de día. n

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