Sánchez evita hablar del rey emérito en su visita a Dubái

El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, considera que España y Emiratos Árabes Unidos abrieron una nueva relación bilateral política y económica secundada por una serie de acuerdos y que tendrá una repercusión positiva en el incremento de las inversiones emiratíes. Sánchez presidió ayer en Dubái los actos conmemorativos del Día de España en la Exposición Universal que se celebra en este emirato y mantuvo una serie de reuniones con las principales autoridades del país. Si en Dubái se entrevistó con el vicepresidente, primer ministro y ministro de Defensa de Emiratos, el jeque Mohamed bin Rashid al Maktum, después se desplazó a Abu Dabi para reunirse con el príncipe heredero y gobernante de facto del país, Mohamed bin Zayerd Al Nahyan.

En su visita a Abu Dabi no hubo contacto alguno con el rey Juan Carlos, quien reside en este emirato desde agosto de 2020 a la espera de que la Fiscalía del Tribunal Supremo resuelva las investigaciones abiertas sobre él. Tampoco aclaró Sánchez si habló sobre la situación del rey emérito con las autoridades de Emiratos, ya que al ser preguntado por este asunto en rueda de prensa evitó hacer comentario alguno y recalcó que la trascendencia de esta visita es de carácter económico y de apertura de oportunidades para inversiones en España. En una conversación informal previa con los periodistas, había evitado también referirse a ello limitándose a señalar: “voy a lo que voy”.

El presidente español, Pedro Sánchez, que estuvo acompañado por su ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, y la titular de Industria y Comercio, Reyes Maroto, aprovechó en su comparecencia ante los periodistas para felicitar a las autoridades de Emiratos por la organización de la Expo de Dubái y para destacar el simbolismo en favor de la sostenibilidad que tiene el pabellón de España.