Una mujer acusa a Adolfo Suárez por agresión sexual cuando era menor de edad
La denunciante, acreditada como víctima de violencia de género, acusa al exmandatario fallecido de abusos continuados y señala posibles encubrimientos en su entorno
Una mujer ha presentado una denuncia ante la Unidad de Atención a la Familia y Mujer de la Policía Nacional contra el expresidente del Gobierno Adolfo Suárez por presuntas agresiones sexuales continuadas con abuso de superioridad que, según su testimonio, habrían tenido lugar entre los años 1982 y 1985.
Según el relato, los hechos se habrían iniciado cuando la denunciante tenía 17 años y Suárez contaba con 50. La mujer sostiene que los abusos se prolongaron durante tres años y que existió la “cooperación necesaria y el encubrimiento” de al menos dos personas del entorno del entonces expresidente. Aunque Suárez falleció en 2014, la denunciante ha decidido dar el paso ahora tras años de silencio y de lo que describe como un proceso de revictimización derivado del reconocimiento público y político de la figura del exmandatario.
En declaraciones a RTVE Noticias, la mujer afirma que no quiere “irse de este mundo guardando el secreto” y asegura que los hechos marcaron su vida “para siempre”. Actualmente cuenta con acreditación oficial como víctima de violencia de género.
Reacciones políticas tras conocerse la denuncia
En el ámbito político, la denuncia ha generado reacciones dispares. Desde el PSOE, su presidenta Cristina Narbona ha expresado su solidaridad con la denunciante y ha calificado el testimonio de “muy impactante”. En una entrevista en RNE, Narbona ha señalado que, pese al fallecimiento de Suárez, podría haber responsabilidades en personas que facilitaron o encubrieron los hechos, algo sobre lo que “la Justicia quizá tenga que pronunciarse”.
No obstante, ha evitado posicionarse sobre una eventual retirada del nombre de Suárez del aeropuerto de Madrid-Barajas, argumentando que sería prematuro avanzar una postura.
Por su parte, Podemos ha reclamado medidas más contundentes. Su secretaria general, Ione Belarra, ha exigido la retirada de todos los reconocimientos institucionales concedidos al expresidente, incluidos el nombre del aeropuerto y los homenajes públicos. Belarra ha agradecido públicamente la valentía de la denunciante y ha cuestionado el papel histórico de determinadas figuras ensalzadas como “padres de la democracia”.
La dirigente morada ha enmarcado el caso en una crítica más amplia a las estructuras de poder y ha defendido el papel del movimiento feminista y de las leyes de igualdad para facilitar que las mujeres puedan identificar, nombrar y denunciar situaciones de violencia.
La denuncia se conoce en un contexto de especial sensibilidad política y social ante varios casos recientes de acoso, y abre un debate sobre cómo abordar institucionalmente acusaciones de esta naturaleza cuando afectan a figuras históricas ya fallecidas.
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